Según el Censo del año 2002 el 4,6 por ciento de la población chilena se reconocía indígena. El 2017, la cifra aumentó a un 12,8 por ciento. Estos cambios sociales también han tenido impacto en nuestra universidad, donde el 6,59 por ciento de los alumnos matriculados el año 2017 se declararon como tales.
Asimismo, los estudiantes extranjeros también han aumentado en la casa de Bello. En postgrado, solo los alumnos extranjeros de América Latina y el Caribe han sido más de 2 mil 300 entre 2011 y 2017.
Teniendo en cuenta la necesidad de visibilizar y abordar estos temas, la Vicerrectoría de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios (VAEC) mediante la Oficina de Equidad e Inclusión (OEI) creó la Comisión de los Pueblos Indígenas, Afrodescendientes y Migrantes de la Universidad de Chile (CPIAM). El objetivo de esta comisión fue generar propuestas y estrategias específicas para abordar la inclusión efectiva de estos pueblos en la Universidad, con respeto a sus identidades, sus culturas y su propio desarrollo.
El vicerrector Juan Cortés afirmo que “es fundamental profundizar en las particularidades de las etnias y culturas que componen la comunidad universitaria”. Ante esto, agregó que en la Universidad "debemos hacernos cargo de ofrecer las condiciones que aseguren a las minorías su ingreso, avance académico, calidad de vida, egreso y titulación oportuna, la no discriminación y convivencia armónica y que estas condiciones nos acompañen y enriquezcan mutuamente”.
“Para nosotros ha sido una experiencia necesaria. Nuestra Universidad debe ir generando la institucionalidad pertinente para los distintos grupos que la conforman y de esa manera garantizar que puedan desarrollarse académicamente, como ciudadanos y con resguardo de su identidad”, sostuvo la directora de la Oficina de Equidad e Inclusión, Maribel Mora Curriao.
Tras la primera reunión, que se realizó el año 2017 y donde participaron representantes de las 17 unidades académicas que conforman pregrado, la CPIAM entregó este jueves su informe a la comunidad universitaria, liberándolo para ser descargado desde la página de la Oficina de Equidad e Inclusión.
Para el miembro de la comisión y coordinador de la Cátedra Indígena de la U. de Chile, Claudio Millacura, “la Universidad está un paso adelante del resto de la institucionalidad chilena respecto a la relación con sus estudiantes y funcionarios indígenas. Sin embargo, esto significa una gran responsabilidad porque parte del problema entre los pueblos indígenas y el Estado de Chile tiene que ver con las confianzas. Lo que sigue es que nuestras autoridades cumplan con los compromisos adquiridos, y eso no será un paso, sino que muchos pasos adelante”.
Propuestas
El informe contempla una política de interculturalidad dentro de la Universidad, la que debiera elaborarse considerando los siguientes principios:
- Promoción y resguardo del desarrollo de las identidades: se debe resguardar la posibilidad de desarrollo de las identidades culturales en todo el proceso educativo, sin discriminación alguna hacia sus expresiones, lengua y costumbres.
- Pertinencia cultural: es necesario que en el proceso formativo se considere a las culturas en contacto, de manera que los participantes se sientan representados en el proceso educativo.
- No discriminación arbitraria: se debe velar por eliminar cualquier tipo de discriminación arbitraria por pueblo o cultura, lengua o expresiones propias
- Respeto por los derechos individuales y colectivos de los pueblos: es necesario considerar que los integrantes de pueblos indígenas y otros, poseen derechos colectivos distintivos y estos se deben respetar en todo momento del proceso.
- Transversalidad e inter-estamentalidad en el desarrollo de las estrategias: es necesario que se realicen estrategias que aborden temáticas de manera transversal y que involucren a los tres estamentos, en todos los campus, para que su impacto sea efectivo.
Asimismo, propone estrategias generales que aseguren la participación e incidencia de los pueblos en las decisiones que los afecten, el compromiso institucional con la interculturalización de la educación superior, el reconocimiento de las realidades socioculturales de los estudiantes extranjeros y un compromiso con la revitalización de las lenguas indígenas.
El informe completo lo pueden ver en este link.