En la antesala de uno de los cambios institucionales más relevantes en la historia del país, se realizó la presentación del libro "La estabilidad del contrato social en Chile", el cual plantea un enfoque sobre la situación actual en base a la teoría económica y la filosofía política.
La publicación, basada en criterios de justicia e instituciones que logren un equilibrio entre el Estado y el mercado, fue destacada como un aporte para entender la encrucijada que llevó a Chile, uno de los países más prósperos de América Latina, a entrar en esta severa crisis. En este contexto, da a conocer los orígenes y posibles salidas de ella a partir de limitaciones a la concentración del poder y una ampliación de los derechos ciudadanos y la participación popular.
“Mucha gente no entiende lo que ha pasado en Chile, se sorprende porque a pesar de que hay mucho progreso material, hay una crisis muy profunda. Estuvimos bastante cerca de vivir situaciones muy caóticas, y la estabilidad actual todo el mundo la percibe como frágil” señala su autor, Guillermo Larraín. “Pero, ¿cómo reconstituir un contrato social estable desde esta situación que ha sido caótica y hoy es frágil? El libro da orientaciones basadas en un enfoque contractualista que difiere de manera importante de la usual visión utilitarista que, de hecho, subyace a esta sorpresa que algunos perciben”, agrega sobre el foco de la obra.
El libro, de esta forma, resalta la relevancia del problema de la legitimidad que viven las instituciones democráticas. De esta forma, plantea -desde la lógica contractualista- que una condición necesaria para que el contrato social sea estable es que los frutos y costos del contrato sean repartidos siguiendo criterios de justicia. “La razón es que la estabilidad se basa en que cada individuo tenga fuertes razones para adherir –y, por lo tanto, someterse– a las reglas del contrato social de manera voluntaria. El requisito de adhesión voluntaria es necesario para que haya libertad, y la condición de estabilidad requiere que haya una carga justa de derechos y obligaciones”, sostiene.
Los criterios de justicia, sin embargo, no son fijos, evolucionan. Para el autor, esto tiene profundas implicancias asociadas al componente formal del contrato social, es decir, la Constitución: se requiere un marco institucional que pueda evolucionar con ductilidad sin crisis, que sea capaz de absorber a tiempo, y en forma eficaz, las cambiantes aspiraciones de la sociedad, que pueda tomar decisiones de manera oportuna. Más allá de estas condiciones, el libro explora soluciones institucionales específicas en varias dimensiones.
En particular, el texto realiza una reflexión y propone que la nueva Constitución considere de manera prioritaria un cambio en el régimen político que permita desconcentrar el poder para dar más atribuciones al Congreso, a las autoridades locales y a la ciudadanía, a través de mecanismos selectos de democracia directa.
Un obra que invita a salir de la pasividad
La presentación de este trabajo fue moderada por Rafael López, director general del Fondo de Cultura Económica en Chile, y contó con la participación del economista y académico de la Universidad de California, Sebastián Edwards; la académica de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de Valparaíso, Bernardita Escobar; el académico de la Facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile, Daniel Hojman; y la investigadora adjunta del Centro de Estudios de Conflicto y Cohesión Social (COES), Claudia Sanhueza.
“Es un libro maravilloso, que tiene la característica de dialogar con el lector de una manera particular. Usa el recurso de expresarse de una manera sencilla, sin recurrir a tecnicismos que puedan de alguna manera opacar el relato. El libro llama a una reacción, tiene esta habilidad de sacar al lector de la pasividad”, manifestó Bernardita Escobar.
Para Daniel Hojman, esta publicación jugará un papel importante en las discusiones del momento. "Se reconoce un aprendizaje y una conversación interdisciplinaria muy potente, no solamente del punto de vista intelectual, sino también por su relevancia política, eso es algo que el libro logra sintetizar. Más allá de ser un tremendo aporte, muy potente, uno siempre se siente interpelado, es un libro que invita a pensar”, puntualizó.
“Es un libro verdaderamente magnífico, está muy bien escrito, investigado y desarrollado en las ideas y argumentos, lo que lo hace un libro de lectura obligatoria para todos”, comentó por su parte Sebastián Edwards.
Más sobre el autor
Guillermo Larraín es ingeniero comercial y máster en economía de la Pontificia Universidad Católica y Ph.D. en Economía en Paris School of Economics. Se desempeña como profesor asociado en la Facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile y SciencesPo en Paris.
Ocupó la presidencia de BancoEstado, fue superintendente de Valores y Seguros, de AFP, y coordinador de política económica del Ministerio de Hacienda. Además, es coautor del libro "El otro modelo. Del orden neoliberal al régimen de lo público", publicado el 2013.
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