La Seremi de Salud de la Región Metropolitana confirmó este fin de semana un caso de sarampión importado. Se trata de una persona de 42 años que realizó un viaje a Armenia durante el mes de julio, que ya se encuentra aislada en su domicilio y en buenas condiciones de salud. Al respecto, el epidemiólogo de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile, Gabriel Cavada, asegura que “la población chilena debe estar tranquila porque está mayoritariamente vacunada contra el sarampión”.
Sin embargo, advierte que las personas nacidas entre los años 1971 y 1981 -como es el caso del paciente que llegó contagiado- recibieron un esquema incompleto de vacunas. Aun así, el especialista afirma que “en Chile el sarampión es una enfermedad que está erradicada o en vías de erradicación y, por lo tanto, uno podría pensar que funciona la inmunidad de rebaño”. Por esta razón, sostiene que el caso de sarampión registrado “no es un problema que vaya a tener perspectivas de hacer un brote epidémico de ninguna especie”, agrega Gabriel Cavada.
¿Qué hacer si nací entre el 71 y el 81?
La infectóloga del Hospital Clínico San Borja Arriará y académica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, Claudia Cortés, explica por su parte que la vacuna contra el sarampión en Chile es parte del Programa Nacional de Inmunizaciones, las que son mandatarias para niñas y niños y se colocan a los 12 y a los 36 meses de edad. Por eso, la especialista precisa que las personas que nacieron entre los años 1971 y 1981, y obtuvieron un esquema incompleto de esta vacuna, es necesario que se vacunen contra esta enfermedad si viajarán fuera del país, ya que dentro no hay casos autóctonos.
La doctora Cortés sostiene que se trata de una enfermedad muy contagiosa que se transmite por vía aérea. Sus síntomas son fiebre alta, tos, ojo rojo/lagrimeo, coriza (mocos acuosos) y luego aparecen manchas en la piel. El periodo de incubación es de 6 a 21 días, con un promedio de 13 a 14 días desde que se ha tenido contacto con el paciente enfermo. No obstante, agrega que “el sarampión es una de las enfermedades ‘casi’ erradicadas gracias a la alta eficacia de la vacuna, pero desgraciadamente por los grupos antivacunas y por la caída de la vacunación durante la pandemia han resurgido casos”.
“El sarampión puede ser muy grave, especialmente en lactantes menores no vacunados o que todavía son muy pequeños para recibir la vacuna, en donde puede evolucionar el cuadro a neumonía o encefalitis”, afirma la especialista. La también académica del Departamento de Medicina Interna de la Facultad de Medicina de la U. de Chile añade, además, que “también es muy grave para madres embarazadas o mal vacunadas, porque se trasmite al feto”.
Por estas razones, los especialistas recalcan la importancia de la vacunación y de que las personas que recibieron un esquema incompleto de vacunación entre los años 1971 y 1981 se acerquen a los servicios de salud para inocularse contra el sarampión, particularmente si tienen planificado algún viaje fuera del país.