Entendiendo los valores democráticos como algo que se ejercita día a día, en el contexto de la “Semana por el Nunca Más”, la Vicerrectoría de Asuntos Académicos y el Departamento de Pregrado invitaron a las y los estudiantes de la Universidad de Chile a reunirse, en Casa Central, en un espacio vivencial para compartir sobre democracia, participación y convivencia en la vida cotidiana, a través de un taller que contó con la colaboración y guía de las profesoras Isabel Castillo, de la Facultad de Gobierno de la Universidad de Chile y Ximena Zúñiga, de la Universidad de Massachusetts Amherst.
“Educar para la democracia representa un imperativo ético y un compromiso inquebrantable en todas las facetas de la vida universitaria. Solo a través de esta educación podemos forjar individuos con pensamiento crítico, un profundo sentido de comunidad y una conciencia histórica sólida. Aportamos a la formación de personas que valoran los derechos humanos, la diversidad y el pluralismo. Este enfoque educativo es fundamental para construir un futuro más justo, equitativo y democrático”, recalcó la subdirectora de Pregrado, Anita Rojas, al iniciar la actividad, a la que también asistió la rectora Rosa Devés.
Por su parte, el vicerrector de Asuntos Académicos, Claudio Pastenes, destacó la relevancia de inculcar la valoración de la democracia a 50 años de haberla perdido por 17 años en Chile. En ese sentido “lo que ha querido hacer esta Vicerrectoría de Asuntos Académicos, con el compromiso y un trabajo muy activo de la dirección de Pregrado, es tomar un contexto de futuro, justamente de esa memoria, relevando la importancia de algo que fue una pérdida muy desgarradora en ese momento, que es la democracia y por lo tanto, cómo formamos para la democracia”.
“La convivencia y el diálogo son centrales para una sociedad democrática y de ahí surge la pregunta, ¿estamos en nuestras vidas cotidianas ejerciendo o ejercitando esos valores?”, animó a preguntarse la profesora Isabel Castillo en la instancia, invitando a las y los estudiantes “a pensar en que la democracia no es algo que ocurre afuera, sino que es algo que implica el desarrollo y el ejercicio de estos valores de diálogo y de estar disponible a conversar con otros y otras”.
En la misma línea, la profesora Ximena Zúñiga subrayó que si bien siempre estamos conversando y el diálogo es simple, no necesariamente es fácil y “la escucha es nuestro desafío (...) por eso es que hoy día los voy a invitar a practicar la escucha activa (...) que es una práctica, es un hábito, un músculo importante que desarrollemos para poder participar, conversar, escuchar y aprender de los otros”, dijo al iniciar la dinámica del taller en la que sus participantes pudieron compartir en grupos y parejas.
Tras el taller, la profesora Silva reafirmó que “estos valores son para trabajarlos siempre y de que nos pueden dar ciertamente satisfacción personal, pero que tienen un componente de construcción de comunidad y de concepción de comunidad política y democrática (...) Ojalá que nos quedemos con eso, que la democracia también se juega en lo cotidiano”.
Entre quienes participaron, en tanto, surgieron conceptos como comprensión, satisfacción, consciencia, empatía, esperanza, participación, colaboración o compromiso, todos “valores, pero también hábitos que podemos comunicar y experimentar”, señaló la profesora Zúñiga, quien relevó que es importante confiar en el diálogo, que “es un hábito que puede ayudar a crear espacios más democráticos y participativos”.
¿Cómo lo vivieron sus participantes?
En el taller participaron estudiantes de distintas facultades de la Universidad, como Cristóbal Soto de la carrera de Contador Auditor, quien manifestó que “durante esta semana que estamos conmemorando los 50 años de la vuelta a la democracia, esta es una de las actividades que me llamó la atención porque hay que ver cómo vemos la democracia hoy en día” y valoró especialmente la actividad “porque no fue una charla o un conversatorio donde uno solamente tenía que escuchar a una persona exponer, sino que tuvimos que participar en distintos roles, tuvimos que comentar distintas experiencias, tuvimos que practicar distintas cosas que no se practican día a día, como la escucha activa. Creo que fue una de las actividades fundamentales en que uno se lleva tarea para la casa”.
Javiera Benítez y Nicol Silva, estudiantes de Ingeniería Comercial y Administración Pública, respectivamente, también participaron del taller y uno de los aspectos que más valoraron fue poder conocer otras realidades, a través de personas de distintas facultades. “Conocí a Nicol, conocí su realidad y tenemos puntos en común o cosas que yo puedo implementar al conocerla (...) Es una buena instancia para conocer personas, practicar la escucha, llegar a un punto de convivir con personas que quizás piensan lo mismo que tú o comparten las mismas cosas que tú o distinto y eso es un complemento”, puntualizó Javiera.
“Yo vine porque dije ‘voy a conocer gente de otras carreras’, porque las facultades de la Chile están tan separadas todas que tú vives en tu facultad y listo, se acabó (…) y estas actividades hacen un llamado diferente de gente”, complementó Nicol, quien también destacó que le interesó el tema porque participa de distintas organizaciones y “muchas veces cuesta comunicarse, cuesta la participación (…) entonces estas cosas me sirven mucho para tratar de ponerlas en práctica, las herramientas, la oratoria y también —como voy a trabajar en administración pública— sirve mucho el tema de la escucha activa”.
Por otra parte, como mensaje para sus compañeras y compañeros de la Universidad, Cristóbal llamó a que “se involucren en las distintas actividades, en los distintos espacios, porque finalmente todos de alguna u otra forma hacemos política, de una u otra forma participamos en esta sociedad y tenemos que cuidar la democracia. Entonces creo que estas oportunidades son enriquecedoras”.
También dirigiéndose a las y los estudiantes de la Universidad, Javiera expresó que “invitaría a mis compañeros a ver estas instancias no como una pérdida de tiempo, porque la mayoría dice, ‘prefiero estudiar o prefiero ir a cátedra’ y realmente uno aprende cosas, comparte con otra gente y no se queda solo con su mundo”.