Con pies de cueca del Ballet Antumapu y un recorrido por la Bodega de Licores Quinta Normal, la Estación Experimental Agronómica “Germán Greve Silva”, ubicada en el Santuario Quebrada de la Plata, celebró 90 años de historia este viernes 20 de octubre. Con el hito, se conmemoraron nueve décadas de docencia e investigación de parte de la Facultad de Ciencias Agronómicas en el predio ubicado en la comuna de Maipú.
La ceremonia fue encabezada por la Rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, y el decano de la Facultad de Ciencias Agronómicas, Gabino Reginato, entre otras autoridades del plantel. "Este recorrido de 90 años de la Estación Experimental no son solo 90 años de la Facultad, sino también de la Universidad de Chile”, señaló. “Escuchar y recordar la historia también nos lleva a honrarla, a reconocer su compromiso de seguir construyendo hacia adelante e integrando desafíos como la sustentabilidad. Esta estación tiene una importancia principal, y quisiera agradecer muy especialmente a su comunidad. Acá nada se hace solo desde los profesores, menos desde las autoridades, ni solo de los y las estudiantes, sino que se hace con una comunidad donde cada uno juega un rol fundamental. En ese sentido, sentimos un profundo agradecimiento con los trabajadores y trabajadoras", agregó.
Por su parte, el decano de la Facultad de Ciencias Agronómicas, Gabino Reginato, partió agradeciendo a todos quienes se hicieron presentes en la ceremonia. “La estación ha sido un foco de conocimiento, aprendizaje y explotación, aprovechando la diversidad topográfica que incluye cerros, quebradas, terrenos de secanos y riego, lo que ha permitido contar con un espacio diverso y multifacético para la investigación científica y la enseñanza”, destacó.
Valoró también el trabajo que se ha hecho en este espacio. “El trabajo de fruticultura y cultivos; el trabajo de ganadería mayor del profesor Eduardo Porten; el manejo de praderas del profesor Alfredo Olivares, hoy continuado por el profesor Luis Piña; la producción de ovinos del profesor Pedro García y de su sucesor, Giorgio Castellaro; y, últimamente, el programa de mejoramiento de frutales del profesor Rodrigo Infante”.
“Paralelamente, se han realizado otras actividades agrícolas, siendo en la actualidad la producción de ciruelas y uvas, utilizadas en la elaboración de nuestros tradicionales licores, en la misma bodega, que se producen en esta estación”, precisó.
La ceremonia incluyó un reconocimiento a tres enólogos y dos enólogas de importante trayectoria: Sergio Daneri, destacado por su aporte en la academia; Maria Luz Marín, y Pablo Morandé, enólogos empresarios destacados en el sector vitivinícola; y Andrés Sánchez y Pilar Miranda, reconocidos como emprendedores y por su aporte gremial.
En la ocasión, el ex académico de la Facultad, Bruno Razeto, entregó unas palabras, donde destacó la historia y relevancia de la estación, contando parte de las anécdotas que pudo compartir en la Universidad. Recordó su paso por la hacienda Rinconada, tanto como alumno y como académico, y lo que fue pasar de clases en los 60 en el centro de Santiago, con terno y corbata, al campo, “en contacto directo con la naturaleza, en medio de una estación experimental agronómica en su apogeo”.
“En esos dos años uno se empapaba de agronomía y era como encontrarse con la profesión en un paraíso agronómico”, contó con humor el profesor, quien relató anécdotas del internado con sus compañeros de época y las bondades que podían disfrutar con los productos que ellos mismos elaboraban, como mantequillas, quesos, y otros.
Un predio con historia
Fue el 17 de abril de 1933 cuando el Consejo Ejecutivo de la Universidad acordó tomar un préstamo para adquirir el fundo “La Rinconada de lo Cerda”, cuyo fin era poner en funcionamiento la Escuela Práctica de Agricultura y Sección de explotación anexas. La acción se concretó en mayo del mismo año bajo el decanato de German Greve Silva.
El terreno tenía una extensión de 3.240 hectáreas y su propósito fue impartir enseñanza agrícola en todos sus grados. Desde entonces, el lugar ha sido destinado a la docencia, extensión, prácticas agrícolas y de preservación de la biodiversidad, además de investigación en áreas como manejo de praderas, mejoramiento genético, nutrición, ecología nutricional, reproducción, sistemas de producción, conservación de la biodiversidad y restauración ecológica.
En el predio también se encuentra el Santuario Quebrada de La Plata, con una extensión de 1.100 ha. que sirven de hogar a cerca del 1% de la biodiversidad mundial. Como parte de su patrimonio cultural, la Estación alberga además la Bodega de Licores Quinta Normal, recinto de enorme tradición y trayectoria en la producción de licores varios, que van desde Brandy (de 5, 10 y 20 años), Aguardiente tipo pisco, Guindado, Ron, Orañac, Nogado, entre otros.
Dentro de los convenios realizados por la Facultad de Ciencias Agronómicas en la Estación Experimental Germán Greve este año, está el convenio de colaboración y comodato que celebró junto al cuerpo de Bomberos de Maipú, que tendrá como objetivo la construcción de una escuela de entrenamiento de bomberos y la creación de una red destinada a la prevención y protección de incendios de la estación experimental y de la comunidad aledaña.
A esto se suma el convenio celebrado recientemente junto a la empresa Lader Energy para la realización de un importante proyecto solar fotovoltaico cuyo objetivo principal es aprovechar los beneficios de la energía solar para potenciar la agricultura en zonas áridas. El proyecto contempla la construcción de un Laboratorio de Investigación, Desarrollo e Innovación asociado a la energía solar.
Para proyectos futuros, existe interés tanto de la Facultad como del Gobierno de China de implementar una granja experimental en la Estación Experimental Germán Greve, un símil de la que ya existe en el país asiático y en la cual participó la Facultad.