La Región de Aysén presenta una particularidad única en Chile: el arco volcánico está a los pies del mar, lo que -en otras palabras- significa que hay una fuente de calor importante cerca de una fuente de agua inagotable. Estas condiciones permiten soñar con la generación de energía limpia, a través de geotermia, para la producción de hidrógeno verde en esta zona del país.
Considerando el potencial geotérmico de la región y las oportunidades de prosperidad que esto significa para sus habitantes, el Gobierno Regional de Aysén adjudicó el proyecto “Prefactibilidad generación de hidrógeno verde con geotermia en fiordo de Aysén” al Centro de Excelencia en Geotermia de Los Andes (CEGA) de la Universidad de Chile, en el marco del Concurso Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) correspondiente al año 2022.
El FIC es un fondo regional dirigido específicamente a financiar iniciativas de innovación a nivel local. En la convocatoria 2022, se adjudicaron proyectos de diversa naturaleza a instituciones públicas y universidades (resultados en este link). Aunque esto ocurrió en diciembre de 2022, diversos trámites administrativos relacionados con la adjudicación llevaron a que esta iniciativa partiera oficialmente en octubre de 2023.
Proyecto geotérmico de hidrógeno verde en Aysén
El CEGA será la unidad encargada de realizar los estudios de prefactibilidad para la instalación de una planta de hidrógeno verde energizada mediante cogeneración geotérmica en el fiordo de Aysén. Durante esta fase, se evaluará la viabilidad técnica y económica del proyecto, además de definir las variables claves para que este proyecto sea viable. La prefactibilidad es una etapa temprana de los proyectos de ingeniería y, en este caso en particular, dicha etapa se extenderá por al menos 18 meses. Si los resultados de esta fase son satisfactorios, el proyecto podrá avanzar a la etapa de ingeniería de detalle.
La propuesta será desarrollada gracias al financiamiento del Gobierno Regional de Aysén, el trabajo técnico del CEGA y el apoyo de la Ilustre Municipalidad de Aysén, de la Ilustre Municipalidad de Cisnes y la Secretaría Regional Ministerial de Medio Ambiente de Aysén.
Por parte del CEGA, el proyecto es liderado por Diego Morata, director del CEGA y académico del Departamento de Geología de la Universidad de Chile; Linda Daniele, directora alterna del CEGA y académica del Departamento de Geología U. de Chile; Bruno Ortega, investigador principal y gestor del proyecto; y Nicolás Pérez, investigador principal del área de Geociencias, quien afirmó que “es fundamental comprender de mejor manera las oportunidades regionales respecto a estas materias energéticas para planificar a tiempo una transición hacia las energías limpias”.
Explorando oportunidades sostenibles
El hidrógeno tiene un enorme potencial energético. Es un gas que puede ser utilizado en transporte, producción de electricidad o generar calor. Históricamente, su producción ha estado vinculada a combustibles fósiles, pero últimamente la producción en base a energías renovables no convencionales ha adquirido relevancia. La generación de hidrógeno con muy bajo impacto ambiental ha llevado al uso del término "Hidrógeno Verde", el cual ha sido acuñado mundialmente como una oportunidad de combustible limpio para el futuro.
Los objetivos climáticos de París y el contexto geopolítico internacional han motivado un intenso desarrollo de la industria de hidrógeno verde y, según el Fondo Monetario Internacional, más de 30 países han puesto en marcha estrategias nacionales de hidrógeno verde en los últimos cinco años. Chile es uno de ellos. En noviembre de 2020, el gobierno presentó al país la "Estrategia Nacional de Hidrógeno Verde", con el año 2030 como objetivo para ser líder global en esta industria.
Al plantear la posibilidad de producir hidrógeno verde en base a una energía limpia como la geotermia, CEGA no solo está contribuyendo al desarrollo de la Región de Aysén, sino también a los objetivos climáticos de nuestro país. "A futuro, el hidrógeno verde puede ser una alternativa energética para el transporte marítimo o terrestre que no contamine y reemplace el petróleo y sus derivados", concluye Nicolás.