Este 22 de enero, en Casa Central, se desarrolló un workshop para presentar los avances de los 27 proyectos innovadores de la Universidad de Chile que se propondrán para ser parte del Instituto de Tecnologías Limpias (ITL). Durante el evento, también se realizó un balance general del quehacer institucional en el marco de esta iniciativa durante el 2023.
Uno de los objetivos del Instituto de Tecnologías Limpias (ITL) es consolidar un ecosistema de innovación sostenible y descentralizado para la generación y aplicación de tecnologías limpias que produzca valor local y nacional. La ejecución de la iniciativa fue encomendada en mayo de 2023 a la Asociación para el Desarrollo del Instituto de Tecnologías Limpias (ASDIT), entidad que contempla institutos tecnológicos tanto nacionales como extranjeros, empresas del sector público y privado, así como 11 universidades chilenas, entre las que destaca la Universidad de Chile.
Con sede en la Región de Antofagasta, el ITL cuenta con una inversión de US$193 millones provenientes de la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO) y la empresa SQM Salar para diversificar la matriz productiva del país.
A nivel institucional, la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM), a través del Centro de Energía, y con el apoyo de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VID), ha asumido la responsabilidad de liderar el proceso de coordinación. Dentro de sus responsabilidades se encuentra el diseño y ejecución del proceso en términos técnicos, además de la articulación con otros espacios de la Universidad.
De acuerdo al vicerrector de Investigación y Desarrollo, Christian González-Billault, “el Instituto de Tecnologías Limpias, por su gran envergadura y alcance, es un motor para desarrollar actividades de I+D y transferencia de tecnologías, así como también un espacio privilegiado para aportar insumos para políticas públicas en uno de los desafíos de nuestro desarrollo”. En este contexto, la autoridad felicitó el liderazgo de la FCFM, que “ha puesto a disposición su capacidad técnica y de articulación”.
Avances 2023
Desde el anuncio de la adjudicación a ASDIT, la Universidad de Chile, reconociendo su compromiso público, ha iniciado diversas acciones para poner en marcha el ITL. Entre ellas, se incluye la formación de equipos interdisciplinarios, la elaboración de insumos para la formulación de proyectos y la elaboración de criterios de selección, estado de propiedad intelectual y ejemplos de verificación. También ha generado un repositorio con toda la información disponible sobre ITL para el trabajo colaborativo y ha dirigido 13 actividades y más de 50 reuniones de coordinación con los equipos y potenciales socios.
Para el académico de FCFM, director del Centro de Energía y coordinador de la iniciativa institucional, Rodrigo Palma, el modelo de trabajo propuesto se alinea estrechamente con la declaración de intereses de la Universidad y refleja la visión de un equipo compuesto por una amplia gama de áreas disciplinares. “Este proceso está recién partiendo y darnos cuenta de lo que como Universidad podemos ofrecer es un logro en sí mismo”, indicó el profesor Palma, agregando que tenemos la “convicción creciente de que, como institución, tenemos un tremendo potencial interdisciplinario, con una muy rica experiencia para poder construir una propuesta para Chile”.
Sobre los proyectos
La Universidad de Chile ha impulsado 27 proyectos integrales que abarcan áreas estratégicas para el Instituto de Tecnologías Limpias. Entre ellas se encuentran: Hidrógeno verde, energía solar, minería sustentable, gestión del agua, innovación en nuevos materiales, formación de capacidades y vínculo con la sociedad. La versatilidad e interrelación son pilares que caracterizan a las propuestas multidisciplinares de la U. de Chile, que, en vinculación con socios industriales, espacios de investigación y entidades nacionales e internacionales, esperan ser seleccionadas por el ITL para aportar sustancialmente al desarrollo de este proyecto país.
Uno de los proyectos es “Lab Museos Norte”, liderado por la académica de la Facultad de Ciencias Sociales y coordinadora ejecutiva de la iniciativa Franco-chilena de la Universidad de Chile, Marisol Facuse. Su objetivo es fomentar diálogos interculturales, resaltar el valor social-cultural y sensibilizar a la comunidad sobre la importancia de preservar el patrimonio y el territorio desde un enfoque sostenible.
Sobre el vínculo de esta iniciativa con el ITL, la profesora Facuse señaló que “ha sido una oportunidad extraordinaria para generar conocimientos e incidencia en los territorios desde la universidad pública, con una perspectiva interdisciplinaria que se ha ido profundizando y robusteciendo a lo largo de estos meses de trabajo conjunto. El ITL reúne equipos de diversas facultades de la Universidad de Chile en articulación con universidades regionales y los actores relevantes de la región, con ello se espera generar diálogos entre comunidades diversas para la promoción de investigación e innovación responsable”.
De manera específica, Facuse destacó el trabajo con el Centro de Energía, pues “ha sido una instancia intensa de aprendizaje de otras perspectivas y culturas académicas en que se valora enormemente la contribución de las ciencias sociales para una aproximación multidimensional y compleja al impacto de los grandes proyectos extractivos en las comunidades, con miras a la transición energética/ecológica”.
Por su parte, la académica del Departamento de Ingeniería en Minas e investigadora del Advanced Mining Technology Center (AMTC) de FCFM, Andreina García, dirige los proyectos “SolArsenic” y “Desalinización de Vanguardia”, que, en asociación con otras entidades, espera impactar a los mercados de tratamiento de agua potable y generar procedimientos de economía circular para evitar los residuos. En el centro de esta propuesta está una nanotecnología para remover arsénico y metales pesados de aguas naturales y efluentes mineros, así como la implementación de procedimientos para la desalinización del agua de mar, incorporando soluciones sostenibles y eficientes.
“Las iniciativas que lidero tienen un nivel de madurez bastante avanzado, por lo que es posible avanzar en la ruta tecnológica con el apoyo del ITL para poder llegar a un escalamiento industrial y hacer una transferencia real de sus beneficios”, comentó. En este sentido, afirmó que el Instituto de Tecnologías Limpias es una “oportunidad para apalancar los pasos y llevar las iniciativas a una escala mayor de validación”.
Respecto al trabajo desarrollado durante estos meses, agregó que “han sido muy movidos, tanto para quienes lideramos las iniciativas como para quienes se encuentran coordinando este esfuerzo. Nosotros nos dedicamos al desarrollo de tecnologías y nos enfocamos en lo técnico, por lo que, sin duda, el trabajo colaborativo e interdisciplinario se vuelve muy provechoso para generar un impacto mayor en el país”.
Finalmente, el profesor Rodrigo Palma hizo una invitación a “las y los investigadores e investigadoras a que se animen y se sumen a esta iniciativa. Podemos armar una red más potente, con más miradas, más ideas novedosas, con más innovación. Anhelamos que, a través de ideas potentes y con una mirada amplia, podamos avanzar hacia un futuro sostenible que permita mejorar la calidad de vida de nuestros compatriotas”.