La descentralización es un factor clave en el fortalecimiento de la democracia. Este proceso implica el traspaso de competencias, responsabilidades y recursos desde el nivel central a los subnacionales. Con ello se modifica el aparato institucional político, administrativo y fiscal para otorgarle una mayor autonomía a las regiones en la toma de decisiones.
En Chile, la descentralización territorial recae en los gobiernos regionales y las municipalidades, sin embargo, nuestro país caracterizado por su centralismo continúa enfrentando grandes desafíos para avanzar en el desarrollo integral de los territorios.
Un gran paso fue la primera elección por sufragio universal de los gobernadores regionales, materializada en mayo de 2021, fue un avance en la democratización de las autoridades territoriales, tema pendiente en la agenda política descentralizadora.
Si bien se inició un proceso de descentralización activo con la restauración democrática entre 1991 y 1992 con la reforma constitucional que creó los gobiernos regionales, y el año 2009 se fortaleció el accionar de los consejos regionales a través de la elección directa de los consejeros regionales, lo que se materializó en marzo de 2014, no fue hasta el año 2017 cuando se dispone una Reforma Constitucional para la elección popular del órgano ejecutivo del Gobierno Regional, es decir, el gobernador regional.
Este proceso permitió la existencia de un organismo autónomo encargado de la administración superior de la región, encabezado por el gobernador electo, y la separación de las funciones de gobierno, ahora radicadas en las delegaciones presidenciales regionales y provinciales.
El académico de la Facultad de Ingeniería Industrial de la Universidad de Chile y colaborador del Centro de Sistemas Públicos, Patricio Meller, manifestó que el proceso de descentralización y regionalización permite que la decisión de lo que se hace en regiones se tome en regiones, y eso involucra una transferencia de poder hacia los territorios.
“En el siglo pasado lo que había era desconcentración de funciones, que se tomaban en el centro y se transferían a regiones. Desde el 90’ comienza el proceso de descentralización administrativa, con decisiones que se pueden tomar a nivel de regiones de forma independiente. Existía la figura del intendente, que era designado por la autoridad gubernamental hasta el 2021, que es cuando los gobernadores comienzan a ser elegidos por cada región con elección directa. Ese es un quiebre respecto a lo que hay en relación al pasado, donde había mucho escrito pero poca realidad empírica en la transferencia de decisiones de poder”.
No obstante, la descentralización debe ir acompañada de diversas acciones de fortalecimiento regional, y requiere de la participación y articulación de múltiples actores, en particular de la ciudadanía.
Sergio Galilea, director del Centro de Análisis de Políticas Públicas (CAPP) de la Facultad de Gobierno de la Universidad de Chile y parte del Consejo Asesor para la Política de Descentralización de Chile expresó que “la descentralización es clave en el desarrollo productivo, equidad, inclusión social, participación ciudadana y además en una moderna gestión pública”.
Por otro lado, mencionó que a pesar de que los gobiernos regionales tienen la capacidad de gestionar recursos, este aún es insuficiente para el desarrollo de los territorios, ya que se ha introducido un criterio de distribución territorial de recursos con énfasis en la superación del centralismo ancestral.
Además, hubo problemas severos de ejecución presupuestaria regional y municipal, acentuado por el caso Convenios, que ha introducido un factor de debilitamiento de la fuerza y la gestión regional. Los gobiernos regionales expresan preocupación por la disminución en la utilización de los recursos fiscales, tras las restricciones impuestas por la Ley de Presupuesto 2024 como consecuencia del caso antes mencionado.
“El desafío es fortalecer los gobiernos regionales y municipios, porque es clave en el desarrollo de Chile”, dijo el profesor Galilea.
El profesor Meller, adicionalmente comentó que actualmente este proceso solo ha ocurrido a nivel administrativo, lo que no ha sido totalmente correspondido con la cesión de recursos para cumplir con esas atribuciones. “En gran medida esta decisión sigue siendo a nivel central, a través de los ministerios sectoriales, lo que produce un desnivel dentro de lo que es la regionalización efectiva”, expresó.