“Un proceso de diálogo y una revisión permanente marcó este proceso de acreditación, que recibimos con alegría en el programa. Es un logro y un reconocimiento al trabajo realizado en conjunto con la Unidad de Aseguramiento de la Calidad Académica (UAAC), el Departamento de Artes Visuales y la Escuela de Postgrado de la Facultad de Artes”, cuenta la prof. Mónica Bate, coordinadora del Magíster en Artes Mediales, a propósito de la reciente acreditación de este programa de estudios, que cuenta con sus postulaciones abiertas para el período 2025.
“Este es el segundo proceso de evaluación, el que fue mucho más fluido ya que se mejoraron aspectos la autoevaluación anterior, como el procesamiento y la digitalización de la información, así que eso facilitó que se pudiera dar este resultado a través de una revisión exhaustiva del programa”, añade la coordinadora sobre esta instancia de acreditación que otorga la CNA, que tiene por objetivo certificar la calidad de los distintos programas de estudio, en función de los propósitos declarados por la institución que los imparte, de los estándares nacionales e internacionales de cada disciplina y del proyecto de desarrollo académico de cada programa. Asimismo, uno de los beneficios principales que otorga la acreditación es que los estudiantes de los programas de postgrado acreditados pueden optar a la beca de Magíster de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID).
“Uno de los puntos fuertes del programa y que más se valoró es el cuerpo académico. Si bien, tiene una base en las artes visuales, el perfil se dirige a lo interdisciplinar que es concordante con la esencia del Magíster en Artes Mediales”, explica la prof. Bate. Otro aspecto relevante en la autoevaluación se relacionó al ingreso del programa a la plataforma U-Cursos y su apertura con la vinculación con el medio. “Hay un curso de residencias, a cargo de la prof. Angela Cura, que fue muy bien evaluado. Justamente tiene que ver con que la investigación y el proceso de creación que se hace en la AFE, traspasan los límites de la academia y cómo los proyectos u obras se llevan a la comunidad. Ese es un aspecto muy relevante para el programa, el poder facilitar que los procesos que llevan los y las estudiantes permeen otras esferas”, sostiene la académica.
Este proceso de autoevaluación constó de diversas etapas, entrevistas y trabajo de focus group con la comunidad de la Facultad de Artes y de la Universidad de Chile. Estas instancias contaron con la intervención de la prof. Laura Gallardo del Departamento de Postgrado y Postítulo, el Vicedecano de la Facultad de Artes, en representación del Decano, prof. Luis Montes, la Directora Académica, prof. Constanza Acuña, el Director de la Escuela de Postgrado, prof. Javier Jaimovich, el Director del Departamento de Artes Visuales, Francisco Sanfuentes y las Coordinadoras de Bibliotecas y Planta Física, Lucía Espinosa y Claudia Vergara, junto con académicos/as, estudiantes y egresados/as del programa. “El día de la visita de pares fue muy significativo para mí, porque hubo una muy buena coordinación y ambiente. Por parte de los pares evaluadores se valoró mucho el compromiso y la participación de toda la comunidad en este proceso”, señala la coordinadora".
¿Cuáles son los desafíos del programa para el 2025?
Uno de nuestros desafíos es poder continuar con la sistematización de las acciones de vinculación con el medio de los estudiantes, que van en la línea de la concepción del programa. Por otra parte, la gestión curricular también es un aspecto a reforzar, dado que nos encontramos revisando nuestro reglamento, por lo que el trabajo a corto plazo contempla cautelar la coherencia y organización de lo que quedará estipulado en el programa. Otro punto importante es continuar robusteciendo el catálogo bibliográfico vinculado a las Artes Mediales y quedando a libre disposición de los estudiantes. Así también mejorar aspectos de equipamiento y generar nuevos convenios con otras instituciones u organizaciones cuyo foco sea el de las artes mediales, ya sea dentro de espacios académicos o fuera de estos.
Las acreditaciones ayudan a hacer estas revisiones y provocan cambios significativos para el desarrollo continuo del programa en términos académicos. Son procesos que contemplan muchas aristas y que se desarrollan desde un punto de vista crítico, lo que promueve el ejercicio de autoevaluación constante como comunidad desde lo académico y lo administrativo. En lo concreto, el haber obtenido una acreditación por 5 años significa, para el Magíster en Artes Mediales, seguir revisándose y sistematizando procedimientos al interior del programa.