Sin duda la Universidad de Chile que recibió a Antonio Skármeta en sus aulas es muy distinta a la de hoy, comenzando porque su paso por el plantel se desarrolló en la entonces Facultad de Filosofía y Educación. Más específicamente, Skármeta -fallecido este martes 15 de octubre a los 83 años de edad-, estudió Filosofía en nuestra casa de estudios, luego de lo cual obtuvo una beca Fulbrigth para desarrollar una maestría en la Universidad de Columbia.
Skármeta, autor de “El entusiasmo", “Desnudo bajo el tejado” y “Ardiente Paciencia”, volvió a la Universidad de Chile, donde trabajó como director de teatro en el Conjunto Artístico del Instituto Pedagógico, y como profesor en la Facultad de Filosofía y Educación. Pero luego del golpe de Estado salió al exilio primero a Argentina y luego a Alemania, donde se radicó.
Parte de esta relación con la U. de Chile y la trayectoria misma del autor fue celebrada el pasado noviembre del 2020, en un encuentro donde, acompañado de su esposa, la escultora Nora Preperski, Skármeta recibió las palabras de afecto y admiración de autoridades, colegas y artistas, entre ellos y ellas, Isabel Allende, Grínor Rojo y Ariel Dorfman; los músicos Joan Manuel Serrat y Toquinho; la actriz María Grazia Cucinotta; y el director Fernando Trueba, entre otros.
Durante la ceremonia de despedida del escritor, realizada esta tarde en el Teatro Nacional Chileno de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, con la presencia de su familia, seres queridos, autoridades académicas y gubernamentales, la Rectora Rosa Devés destacó "hoy nos congregamos bajo el peso de la ausencia para despedir al hombre cuya vida fue un viaje de letras, de palabras, de historias que se entrelazaron con la historia de nuestro país y la historia del mundo".
"Desde su juventud como estudiante de Filosofía en la Universidad de Chile, él entendió que la literatura era mucho más que una ocupación: era un destino, era un modo de vivir y de transformar la sociedad. Como académico y como eterno estudiante de la vida, dedicó sus esfuerzos a compartir con las generaciones futuras esa convicción de que el arte, la palabra y el libro son herramientas que nos permiten mirar más allá, soñar más alto, ser solidarios y compasivos y también ser más libres. Su obra, reconocida con el Premio Nacional de Literatura, fue un eco de esas profundas inquietudes”, agregó la máxima autoridad del plantel.
Por su parte, la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Carolina Arredondo, señaló que "Antonio fue un narrador de lo humano, de lo cotidiano, pero también de lo trascendental. A través de sus novelas, cuentos y guiones, nos mostró el poder de la literatura para conectar, para reflexionar sobre nuestra identidad, y para recordarnos que, incluso en medio de las dificultades, la esperanza y el amor siempre prevalecen. Su obra quedará como un legado imborrable en nuestras letras y en nuestros corazones".
En tanto, la ensayista Adriana Valdés, afirmó que "Chile no sería tan conocido en el extranjero sin la labor de Antonio Skármeta. Su aporte a la educación y su paciencia como árbitro del arte, primero en el teatro y luego en el cine internacional, ha sido fundamental. A través de sus obras, premios y relaciones públicas, elevó el nombre de nuestro país a un nivel cultural altísimo, dejando una huella imborrable en las letras y la cultura chilena".
En representación de la familia, Alia Trabucco Zerán, leyó el texto "Decálogo contra la muerte. Homenaje a Antonio, homenaje a Skármeta", en el que recorrió las facetas públicas y privadas del escritor. "Queda el cine y el teatro, queda la palabra, queda la carraspera, quedan las notas al costado del teléfono, queda su amor a la palabra y las palabras; siempre las palabras que parece que la muerte nunca sabrá pronunciar. Te seguiremos leyendo Antonio Skármeta y te recordaremos siempre querido Antonio", cerró la escritora.
Además, Cristián Montes Capó, académico del Departamento de Literatura, señaló que "en toda su producción narrativa sorprende la privilegiada técnica narrativa y la presencia de un estilo inconfundible. La escritura despliega un amplio dispositivo de recursos gramaticales, lingüísticos y estéticos, a partir de los cuales se logra un perfecto equilibrio entre la forma de narrar y los contenidos representados".
Trayectoria
Antonio Skármeta recibió el año 2014 el Premio Nacional de Literatura, que se suma al Premio Casa de las Américas, el premio Altazor, Artes y Letras de Italia, Planeta, el Municipal de Literatura de Santiago, designado "Caballero de la Orden de las Artes y Letras" de Francia, "Comendador" por Italia y la "Orden Marko Marulic" de Croacia, entre otros, y a su reconocimiento internacional por su obra, particularmente por "Ardiente paciencia" (posteriormente titulada El cartero de Neruda), que ha sido traducida a más de treinta idiomas y adaptada al cine y teatro.
Como parte de su trayectoria también fue fundador del taller literario Heinrich Böll, en el Instituto Goethe de Santiago, así como del programa televisivo El Show de los Libros, luego del retorno a la democracia, pero antecedido del proyecto "Libro abierto", del canal de la U. de Chile en 1968. También, fue parte del momento fundacional de la Revista Chilena de Literatura, y del equipo de la publicación de la revista cultural “La Quinta Rueda”, en el contexto de la Unidad Popular.
Sepelio y ceremonia de despedida
El sepelio y la ceremonia de despedida de Antonio Skármeta tendrán lugar en el Teatro Nacional Chileno de la Universidad de Chile. El velatorio se llevará a cabo hoy, desde las 13:30 hasta las 17:30 horas, en el teatro ubicado en Morandé 25, Santiago.
A las 16:30 horas, se realizará un acto en su honor, donde participarán autoridades, miembros de la comunidad universitaria y representantes del ámbito cultural, rindiendo homenaje a su legado.
El funeral, en tanto, se realizará el miércoles 16 de octubre a las 12:00 hrs en el Parque del Recuerdo de Huechuraba.