Académicas de la facultad innovan e inciden en salud e infancias con proyectos financiados por la VID

Académicas de la facultad innovan e inciden en salud e infancias

Las ciencias sociales una vez más dispuestas al servicio de comunidades y organizaciones, esta vez en temas de salud e infancias. Así lo demuestran dos proyectos de investigación que ganaron el Concurso “Desafíos Públicos UCH: Innovación para mejores políticas públicas, año 2023-2024” de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VID) de la Universidad de Chile. 

Se trata del proyecto “Recursos digitales de información en salud para mejorar el alcance del programa Apoya Mujer migrante”, liderado por la académica del Depto. de Trabajo Social, Caterine Galaz, y el proyecto "Diseño conceptual y lineamientos para la implementación de programas de intervención reparatoria para niños, niñas y adolescentes que han sido vulnerados en sus derechos", dirigido por la académica del Depto. de Psicología, Claudia Capella.

Con ambas académicas e investigadoras de la facultad, la periodista Carolina Escobar, dialogó en el episodio 39 de Bitácora Social, el podcast de la Facultad de Cs. Sociales de la U. de Chile.  Durante el primer bloque del podcast, se conversó con Caterine Galaz, quien es académica del Depto. de Trabajo Social y directora de la Escuela de Postgrado de la facultad.

Galaz fue una de las ganadoras de este concurso con el proyecto “Recursos digitales de información en salud para mejorar el alcance del programa Apoya Mujer migrante”. Una iniciativa que se hace en alianza con el Hospital Clínico de la Universidad de Chile, académicos/as de la Facultad de Medicina de nuestra casa de estudios y el Servicio Nacional de Migraciones.

La académica recordó que estos temas los viene trabajando hace tiempo el Núcleo Diversidad y Género: Abordajes Feministas Interseccionales, con el Servicio Nacional de Migraciones y el programa Apoya Mujer migrante”. En ese contexto, el equipo detectó que uno de los problemas era llegar con información fidedigna a las mujeres relativa al acceso con que ellas disponen en materia de salud, esto considerando que las personas se informaban por Redes Sociales de manera informal.

Por otro lado, el Hospital de la U. de Chile mantiene una preocupación y es que se amplía su público, por tanto, otra de las preocupaciones es cómo llegar a los/as profesionales para que cuenten con una perspectiva intercultural más diversa. Tener un mayor alcance de su información es otro de sus desafíos.

En relación con las usuarias del sistema de salud público, persisten prejuicios como –por ejemplo– “pensar que si se encuentran en una situación migratoria irregular no pueden acceder a la salud y carecen de ese derecho, lo cual no es así, pues la salud es accesible para todos/as independiente de su situación. Asimismo, muchas personas están desinformadas en temas de atención dental, cuidados paliativos del cáncer, y en otros ámbitos”. Además, existe el desafío de levantar información para los/as propios profesionales y administrativos/as del hospital, porque además de prejuicios hay desconocimiento de la norma sobre el nivel de accesibilidad, especialmente en regiones.

Para resolver parte de esos problemas, el equipo liderado por la profesora Galaz trabaja en una herramienta digital para facilitar el acceso a la información en salud y se hará sobre la base de las necesidades de las mujeres con que van a trabajar, considerando que el rango etario de las mujeres migrantes fluctúa de los 18 a los 50 años.

Frente a esa realidad, “yo creo que desde las distintas disciplinas nos inspira la intención de cambio. Pensamos en cómo desarrollar un mejor servicio de salud para un público que se encuentra en una situación de vulneración de derechos”, precisó Caterine Galaz.

Acerca de la metodología, en la primera fase de diagnóstico de la investigación, “tenemos contemplado hacer una encuesta no representativa para alcanzar a la mayor cantidad posible de mujeres usuarias del sistema de salud. También haremos unos grupos de discusión online en regiones para conocer sus experiencias. Por otro lado, haremos encuesta online a profesionales de salud por región y también grupos focales”, detalló.

Dentro del programa “Apoya Mujer migrante” se hacían encuentros presenciales para entregar información a las usuarias respecto de sus derechos en salud. “Sin embargo, uno de los problemas que detectamos es que no tienen mucho alcance, no llegan a todas las mujeres migrantes actuales. Entonces, la idea de una plataforma tecnológica es ayudar de manera innovadora al programa “Apoya Mujer Migrante” para que más mujeres accedan a la información que requieren en salud y, al mismo tiempo, brindarles más acceso a los/as mismos/as profesionales de la salud y en migración”.

Intervención reparatoria psicoterapéutica para niños/as de manera situada

La segunda parte del podcast Bitácora Social, contó con la entrevista a Claudia Capella, académica del Depto. de Psicología, quien lidera el proyecto "Diseño conceptual y lineamientos para la implementación de programas de intervención reparatoria para niños, niñas y adolescentes que han sido vulnerados en sus derechos". Este es el segundo proyecto ganador del Concurso “Desafíos Públicos UCH: Innovación para mejores políticas públicas, año 2023-2024” de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo (VID) de la Universidad de Chile.

El Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, conocido como Mejor Niñez, fue creado por la Ley N° 21.302, siendo la institución que reemplazó al Servicio Nacional de Menores (SENAME), iniciando su proceso de implementación en octubre de 2021. 

Dicho cambio, surgió como una respuesta institucional a la crisis del sistema de protección de la infancia, que condujo a la elaboración de propuestas concretas para transformar la institucionalidad existente hasta ese momento (SENAME). A lo largo de ese período de crisis, se observaron y se siguen observando -entre otras cosas- que faltan orientaciones técnicas actualizadas y fundamentadas en evidencias nacionales e internacionales, para guiar intervenciones centradas en la reparación del daño causado por la violencia y los malos tratos. En este contexto, uno de los principales desafíos del nuevo Servicio es el rediseño de todos sus programas.

El proyecto que lidera Claudia Capella, precisamente, tiene como eje central, la colaboración entre académicos de la Universidad de Chile y el Servicio, en específico, su Unidad de Diseño, para el abordaje innovador del desafío de elaboración de nuevos diseños y orientaciones para la política pública en infancia, y específicamente, los programas de intervención reparatoria.

No obstante, el trabajo que viene desarrollando el equipo data de hace más de una década. Según la también investigadora del Núcleo de Estudios Interdisciplinarios en Infancias de la facultad, el cambio institucional de SENAME al Servicio Mejor Niñez ha relevado la importancia de repensar el diseño de las intervenciones con los niños/as.

Al respecto, han estudiado las intervenciones psicoterapéuticas con niños/as que han sido víctimas de agresión sexual, en un equipo compuesto por estudiantes del Departamento de psicología y otros/as académicos de la Facultad y de otras Universidades. “Concretamente, hemos trabajado con los Programas Especializados en Maltrato y Abuso Sexual Grave (PRM) e investigando, particularmente, los procesos de intervención psicoterapéutica en maltrato grave de connotación sexual”, señaló Capella.

Describió que muchos/as niños/as han sido víctimas de vulneración de derechos dentro de sus propios contextos familiares, volviendo más desafiantes las intervenciones. Como se ha hecho un trabajo también con sus entornos sociales más próximos, han podido constatar también cambios en las familias tras las intervenciones psicoterapéuticas.

Entre los principales cambios, la investigadora destaca que, a lo largo del proceso de intervención, los/as adultos/as responsables de los niños/as pueden trabajar sus experiencias o sus propias historias previas de traumas durante su niñez. Asimismo, las intervenciones psicoterapéuticas les han ayudado a entender mejor a sus hijos/as.

“Pero hay factores contextuales que dificultan el proceso, también judiciales y otros relativos a la larga espera que viven niños/as para ser ingresados a los programas, debido a la alta demanda. Otra dificultad en las intervenciones en los PRM es la alta rotación de los/as profesionales. Además, hemos observado que el lineamiento del servicio es muy general, siendo que los profesionales requieren un lineamiento más específico”, apuntó la académica de Psicología.

En el marco de la implementación del nuevo Servicio Mejor Niñez, se desarrolla una nueva oferta de los programas relativos a intervención reparatoria. Esos programas aún no están diseñados y es ahí donde aportará el proyecto liderado por la académica Claudia Capella, en coordinación con la contraparte que es la Unidad de Diseño.

“Dentro del proyecto, tenemos una primera fase que es generar -a partir de investigaciones previas, literatura internacional, etc.- un rediseño conceptual. En segundo lugar, queremos dialogar con los principales ejecutores de la oferta actual del servicio que son los colaboradores/ejecutores. Queremos, también, conversar con profesionales y directores de PRM y discutir este diseño”, indicó.

Por tanto, “queremos generar una propuesta que sea factible de implementar y proponerla a la Unidad de Diseño. Junto con esto del diseño de implementación, hay necesidades específicas de capacitación y formación de profesionales para estos programas”. “Hemos concordado con el equipo que uno de los elementos necesarios de modificar en cuanto al diseño, es el desarrollo de lineamientos más claros de cómo trabajar con madres o adultos cuidadores y responsables, considerando sus vivencias; también las trayectorias de intervención”; hacer intervenciones de acuerdo al contexto, terapias a largo plazo, o intervenciones diádicas cuidadores-hijo, según amerite el o los casos.

El proyecto dura 12 meses, “y queremos finalizar con algunos productos académicos. Pero también, como se trata de una iniciativa apoyada por la VID que busca aportar a la política pública, queremos presentar un documento con lineamientos tanto para el servicio como para ejecutores. Esto además de organizar seminarios y discusiones con ejecutores, profesionales del servicio, y otras actividades de diálogo y extensión”.