Cinco nuevos Doctores FAU reciben su Medalla Doctoral

Cinco nuevos Doctores FAU reciben su Medalla Doctoral

Familiares, amigos, profesores y profesoras. Una comunidad universitaria reunida y emocionada se congregó este lunes 18 de noviembre en el Salón de Honor de Casa Central, para recibir a las y los nuevos 201 doctores de la U. de Chile. Como parte de la celebración del aniversario 182 del plantel, este grupo de graduados y graduadas concluyó su proceso formativo entre el segundo semestre del 2023 y primer semestre del 2024.

Así, la cita celebratoria reunió a las y los egresados provenientes de los 43 programas de Doctorado de la Universidad de Chile, incluidos cinco  programas interfacultades e interinstitucionales, representando en total a 15 facultades del plantel.

"Estos 201 doctores y doctoras aportan desde la Universidad de Chile y, a través de ellos la propia Universidad de Chile, al conocimiento. Nos hacemos presentes como Universidad a nivel global gracias a cada uno y una de ustedes. Sin su creatividad y sin su esfuerzo, no sería posible para esta Universidad cumplir con esta tarea que la distingue y que la hace ser la Universidad de Chile que es. Alcanzar el grado de doctor es importante para ustedes en lo individual: abrirá muchas posibilidades de realización, pero también lo es y en gran manera para la institución. Son ustedes quienes la animan, con su esfuerzo, su preparación académica, su inteligencia y su pasión. Son el motor y el espíritu creativo de nuestra Universidad, que finalmente es lo que mueve todo lo demás", señaló la Rectora Rosa Devés.

Especial Mención al DTES

El director de Postgrado y Postítulo, Osvaldo Salazar, “Llevan consigo este grado académico, que atestigua su dominio en un área del conocimiento. Quiero también resaltar el grado de doctor o doctora de la U. de Chile, lleva consigo también como un sello los compromisos fundamentales de nuestra universidad, que incluyen el compromiso ético, la responsabilidad social y ciudadana, el desarrollo humano sustentable, y el respeto por la diversidad y la multiculturalidad”.

Especial mención tuvo el director sobre la primera cohorte del Doctorado de Territorio, Espacio y Sociedad de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo. “Sepan ustedes que son pioneras y pioneras del estudio integrado de problemas territoriales con un énfasis disciplinar en el país”, indicó el profesor Salazar. 

Los nuevos Doctores y Doctoras de la FAU son Francesco Sepúlveda, Gabriela Guevara, Juliette Marín, Patricia Retamal y Pedro Achondo, quienes recibieron su Diploma y Medalla Doctoral de mano de la Rectora Rosa Devés acompañada por el Decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo Prof. Manuel Amaya.

Pasión y sentido

Francesco Sepúlveda, egresado del Doctorado de Territorio, Espacio y Sociedad de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, ofreció unas palabras en representación de esta generación de doctoras y doctores.

“Estamos aquí porque logramos superar una prueba sumamente difícil”, señaló el doctor, relevando la dimensión humana y familiar del proceso de cursar un programa de doctorado, incluyendo el sacrificio de las y los autores y sus familias. “No estaríamos acá si no fuera por otros y otras. Por esto, agradezcamos a quienes no hemos agradecido todavía”, dijo. 

“Emprender un doctorado es cruzar un puente hecho de manos amigas, de hombros sobre los cuales apoyarse a llorar cuando hace falta, de abrazos en los que descansar. Un extenso tejido de amor y cariño en que estamos inmersos y que debemos seguir tejiendo para las personas que nos acompañan hoy, para aquellas personas que ya se han ido y para las que aún no hacen parte de nuestras vidas”, agregó. 

Ahondando en la dimensión humana, prosiguió abordando el compromiso ético de las y los doctores egresados del plantel. "Todos, incluyendo nosotros los doctores, somos personas completas, no somos y no debemos ser mentes ambulantes, abstractas, intachables, constructoras de conocimientos igualmente desapegados de sus condiciones de producción y reproducción. Tenemos el deber de asumirnos no solamente en nuestras palabras y posiciones, como estamos acostumbrados en la academia, sino también en nuestros cuerpos y afectos”, indicó.

Finalmente, indicó que "terminar esta etapa la lucha continua en el demandante mundo académico”. Allí, "la verdad de las cosas es que si uno ha pasado por un doctorado es porque le gusta este particular mundo, estudiar, escribir, investigar, dar clases. Construir conocimiento se vuelven más que hábitos cuando hay una pasión que lo moviliza y le da sentido”.