La autoevaluación para la acreditación institucional fue un proceso intenso y participativo que realizaron los integrantes de la Universidad de Chile este 2024. Inició con la instalación de las subcomisiones de autoevaluación institucional, que redactaron los capítulos y dieron cuenta del desarrollo de la universidad en las distintas dimensiones que la componen: docencia; gestión de recursos; investigación, creación e innovación; vinculación con el medio y aseguramiento interno de la calidad.Estas subcomisiones desarrollaron un proceso metódico y profundo para exponer de qué manera la universidad avanzó entre el proceso de acreditación que finalizó el 2018 y el actual.
En paralelo, las comisiones locales de autoevaluación institucional entregaron su análisis respecto a lo que sucedió en el periodo entre acreditaciones en las respectivas unidades académicas. Al mismo tiempo, en un trabajo colaborativo entre el nivel central y los equipos de facultad, se buscó asegurar la coherencia de los diversos programas formativos con el modelo educativo y las demás políticas y orientaciones de la universidad, en vista a la muestra intencionada de programas de estudio. De esta manera, toda la universidad, en todos sus campus y en todos sus estamentos, evaluó su quehacer en función de su misión y de lo que está llamada a ser en los próximos años.
La Rectora Rosa Devés, durante su discurso en el aniversario 182 de la universidad, sostuvo que el proceso de autoevaluación para la acreditación es un ejercicio de examinación y visibilización del trabajo necesario para “preguntarnos respecto al grado de cumplimiento de nuestra misión”. Explicó que, además de resguardar los principios fundamentales de la Universidad de Chile, también se deben enfrentar los desafíos que la sociedad muestra como una expresión de la calidad de la formación y del servicio al país que ofrece la universidad.
Por su parte, la prorrectora, Alejandra Mizala, sostuvo que el proceso de autoevaluación que “marcó la vida de la universidad este año será un impulso para determinar metas y analizar los medios para seguir respondiendo a las necesidades de las y los jóvenes que viven en este país y en este tiempo tan desafiante”. Además, agradeció a las 15 mil quinientas personas que participaron de este proceso, ya sea conformando alguna comisión o subcomisión, contestando la encuesta y motivando a otros para que entreguen su opinión. “Creo que el lema de esta acreditación, ‘Todas y todos acreditamos la U’, se ha hecho muy concreto este 2024. Espero que el próximo año, tras entregar esta autoevaluación a la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), podamos difundir lo más destacado de esta fotografía actualizada, recibir a la comisión de pares evaluadores y, finalmente, conocer la resolución de la CNA”.
Parte importante de la labor realizada este año se puede ver en este: