El Centro de Hipoterapia Mundo Granja de la Universidad de Chile comenzó a funcionar en octubre del año pasado gracias a la aprobación de un proyecto del Fondo Nacional de la Discapacidad (FONADIS). "Desde entonces ha trabajado con la intención de apoyar a quienes cuentan con escasos recursos económicos para optar a terapias de rehabilitación", explicó su Director, Sergio Hernández.
"El objetivo es entregar un servicio integral, mediante un trabajo interdisciplinario de alto nivel. Para ello contamos con kinesiólogos, psicólogos y un gran equipo de estudiantes voluntarios de Terapia Ocupacional, Kinesiología, Derecho, Medicina Veterinaria e Ingeniería Forestal, entre otras carreras", precisó, agregando que "han pasado por nuestro centro 20 niños y jóvenes -entre 3 y 23 años- que han llegado en forma independiente o a través de colegios".
Un tratamiento efectivo
La Hipoterapia está recomendada para enfermedades como "parálisis cerebral, síndrome de Down, deficiencia mental, autismo, déficit atencional y dificultades psicomotoras y sensoriales", puntualizó Sergio Hernández, haciendo hincapié en que es necesario contar con "una adecuada evaluación profesional para evidenciar que no existan contraindicaciones".
La virtud de este sistema radica en que no tiene un período de término establecido, pues "a medida que se cumplen los objetivos se puede replantear el trabajo, buscando alcanzar nuevas metas".
"El movimiento del caballo produce en el jinete la misma sensación del caminar humano, por lo tanto en una persona con problemas físicos se logra estimulación a nivel articular, muscular y nerviosa en un patrón adecuado que, normalmente, no podrían recibir y que es difícil de igualar con la utilización de máquinas", argumentó.
A nivel psicológico, en tanto, "el ser humano al interactuar con el medio ambiente y en especial con seres vivos produce una liberación metabólica de ciertas sustancias vinculadas con el bienestar, como dopamina, serotonina y endorfinas".
"Se ha visto, además, que ayuda en la autoestima el que una persona discapacitada -estando arriba del caballo- pueda verse por sobre el resto. Ésto acoplado al trabajo realizado por un psicólogo puede potenciar los resultados. El caballo es una herramienta terapéutica, que guiada por un profesional, permite el cumplimiento de positivas metas en los pacientes", aseveró el académico.
Integrando a las familias en el proceso
"Durante 2008 hemos ofrecido atención de especialistas a través de programas particulares y/o grupales. En este último caso no sólo trabajamos con el paciente, sino que con sus familias", sostuvo Sergio Hernández. Para tales tareas en el centro se han diseñado talleres dirigidos al entorno cercano "capacitándolo en ejercicios de apoyo, para conseguir una continuidad de rehabilitación en sus casas".
"Es reconfortante escuchar los comentarios de los familiares de nuestros beneficiarios cuando cuentan los avances que han logrado y que les ha permitido en cierto modo integrarse de mejor forma a la sociedad", expresó.
Un recorrido que continúa
El Centro de Hipoterapia se encuentra en las dependencias de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias de la Universidad de Chile (Avenida Santa Rosa N° 11735, La Pintana). Cuenta con una cancha de entrenamiento y caballos preparados constantemente para el trabajo hipo terapéutico.
Es una entidad "sin fines de lucro, en la que los ingresos están destinados a costear gastos operacionales. Por tal motivo, las sesiones son pagadas. Sin embargo, ofrecemos la opción de convenios con diversas instituciones públicas y privadas, permitiendo así un costo de sesión menor", dijo el experto.
Para el próximo año explicó- "buscamos consolidar nuestro esquema de trabajo y, si es posible, incorporar a profesionales de otras áreas para incrementar nuestra acción". También está la idea de generar "convenios municipales en el área sur de Santiago, para que los beneficiarios que se inscriban puedan tener terapias gratuitas o a muy bajo costo".
Un aporte a la sociedad
"La Universidad de Chile desde sus comienzos a tenido como visión el apoyo a la comunidad y este tipo de iniciativas, sin duda, contribuye a mantener el espíritu de nuestra Casa de Estudios", manifestó el Profesor.
"Este centro ha significado un gran reto. Sería importante contar con auspicios y apoyos que permitan su crecimiento y, si fuera posible, a futuro tener becas para ciertos beneficiarios. De todas maneras -y pese a las dificultades propias del camino- todo es compensado por los resultados en la calidad de vida de los pacientes, que inyectan fuerzas para seguir adelante con esta iniciativa".
"Hasta ahora debido a que trabajamos en la Facultad, tenemos propuestas de más trabajos vinculados con los caballos, relacionados con la capacitacion de estos animales para Hipoterapia. En el área de la salud humana hay intenciones de generar investigación, para lo que ya estamos recopilando material", concluyó.