Discurso del Prof. Luis A. Riveros en Ceremonia de Presentación del Libro del III Encuentro de Investigación y entrega de Convenios de Proyectos financiados por el Depto. de Investigación
Aquí estamos para la presentación de un libro y ustedes lo van a ver; es un libro hermosamente diseñado, pero lo más importante de un libro, por cierto, es el contenido. Y cuando uno lo hojea, probablemente la primera pregunta es, en cuántas instituciones en Chile tiene lugar un análisis en esa profundidad, de esa magnitud, con esos alcances, sobre una materia tan importante para una universidad y para el país como es la investigación. Ahí están las presentaciones de nuestros decanos, cada uno abordó el problema desde su propia perspectiva, de la propia estructura del diseño organizacional de la universidad, pero ahí están los aportes de tantos de nuestros académicos destacados que nos hicieron reflexionar en un día frío en el Salón de Honor, respecto de los problemas grandes que tiene todavía la investigación en la universidad, pero también en el país.
Hay allí una mirada a los problemas del país y yo creo que ese libro en varias de las presentaciones se desliza con mucha claridad nuestra insatisfacción con las formas en cómo se diseñan programas, iniciativas y probablemente también, nuestra insatisfacción con la lentitud con que el país ha ido abordando los desafíos de investigación de mayor conocimiento que tiene que enfrentar si quiere efectivamente lograr aquello que se dice en el campo del crecimiento del desarrollo y de la equidad.
Creo que allí hay un material valiosisimo para la discusión nacional, creo que es un material que va ser muy bienvenido fuera de la universidad, porque siento que este es un tema que no se ha discutido en profundidad. Tuvimos la oportunidad de estar en el Senado de la República en las discusiones preliminares sobre el Fondo de innovación para la competitividad y lo que queda de la discusión que uno escucha es que no existe claridad respecto de qué es lo que se quiere y cómo se quiere hacer; no existe claridad de cuál es el diseño que tenemos que tener para el aparato de investigación nacional, independientemente de los financiamientos, básicamente por la estructura de políticas; cuáles son los diseños de mandos, cuáles son las estructuras de incentivo. No hay claridad respecto de esos temas. Y por lo tanto, el país sigue como actuando a ciegas en un campo que es tan importante como éste y en el cual las decisiones están fundamentalmente guiadas por ánimos políticos más bien que por los ánimos estrictamente académicos que tienen que estar tras una investigación que el país necesita para sus objetivos económicos.
Creo que de este libro sale todo eso, y creo que va a tener un impacto importante. Todos tenemos la responsabilidad de divulgarlo porque muestra también que esta es efectivamente una universidad nacional. Ahí en ese libro no está solamente la discusión de cómo resolvemos nuestros problemas en lo interno, de que es lo que tenemos que hacer para poder mejorar la forma en que organizamos nuestro propio trabajo, desde luego eso está ahí, pero mucho más que eso mirando al país, mirando los grandes desafíos que tiene el sistema de investigación y el sistema de Educación Superior en Chile, y hay propuestas, hay ideas, hay insistencia en esas ideas y en esas propuestas de parte de muchos de nuestros profesores e investigadores.
En la intervención que yo hice al final de esa reunión, yo agradecí a los investigadores de la Universidad de Chile por su trabajo y yo debo reiterar eso. La Universidad de Chile fue, recientemente, en un ranking que elaboró la Dirección de Educación Superior del Ministerio de Educación para propósito del arancel de referencia, puesta como la número uno. Esta Universidad debe ser siempre la número uno, pero cuando uno mira al interior de los indicadores se da cuenta de que la Universidad de Chile es número uno por sus resultados en investigación, por los proyectos por investigador, por las publicaciones ISIS por investigador o jornada completa equivalente, por toda esa dimensión que significa el nuevo conocimiento donde tenemos nosotros que seguir apostando.
Hay otros indicadores en que la universidad tiene problemas y tenemos que corregirlo y ahí está el plan estratégico de la Universidad justamente para abordarlo en los próximos años. Hay debilidades estructurales que se han ido generando por acumulación de problemas en el tiempo, pero la investigación es, en esta universidad, la joya más importante que hay que cuidar y eso está a cargo de los investigadores de la institución, de quienes realizan día a día su trabajo, para realizar los proyectos, para conseguirles financiamiento, para poder publicarlos para ser relevantes en la creación de nuevas ideas y eso hay que agradecerlo porque ciertamente eso permite conservar la ventaja competitiva más importante de la Universidad de Chile, que es la investigación y el postgrado, y así se han desarrollado en los últimos años los lineamientos estratégicos de la institución.
Pero hoy día tenemos nuevos desafíos y lo he estado planteando en las facultades; claramente está el desafío del Fondo de innovación para la competitividad; ahí no sólo porque hay recursos -que los haya es importante- y como lo ha dicho el Vicerrector, nosotros vamos apoyar con todo lo que podemos la preparación de buenos proyectos. Pero más importante aún que los recursos es el hecho de que la Universidad de Chile debe ser la número uno nuevamente en esa línea de proyectos. Esos son los proyectos para el futuro del país, los proyectos que teóricamente nos van a brindar las tecnologías, las nuevas aplicaciones, las innovaciones en producción que van a permitir al país ese salto en productividad que necesita para todos los demás objetivos económicos y sociales y desde luego que tenemos que estar número uno ahí.
Desde luego que tenemos que encabezar eso que es tan importante para Chile, desde luego que vamos a tener que aprender a cómo integrar eso ahora dentro de la evaluación de nuestro trabajo académico. Se nos está cambiando el mundo y nos están cambiando las condiciones en las cuales se realiza el trabajo y por lo tanto las condiciones en las cuales tenemos que evaluarlo finalmente y tendremos que pensar también en eso. Pero lo primero es que si la Universidad de Chile ha sido 30 ó 40 % del sistema de investigación nacional sistemáticamente en todos los fondos, en todas las formas en que podamos medir investigación, tenemos que ser también 30 ó 40 % de esta nueva iniciativa nacional que es tan importante para el país, y eso requiere no sólo tener buenos proyectos y buenas ideas, requiere también una asociación distinta y tenemos que ir a las regiones, como se ha dicho, a trabajar con las universidades regionales porque ahí hay recursos y porque ahí también están evidentemente como ustedes bien lo saben las oportunidades para hacer nuevos proyectos para generar nuevas ideas.
Tenemos que tener una capacidad de asociarnos con la empresa privada, probablemente mucho mayor de la que hemos tenido en el pasado, con diferente vocación y eso no es importante sólo para financiar los proyectos de hoy, es porque si uno lo piensa en un sentido estratégico, la única forma en que van a crecer los recursos de investigación para el país de verdad va ser a través del aporte de la empresa privada, de la iniciativa privada y es mejor que nosotros estemos primero en la línea para asociarnos con ello creativamente, y poder entonces producir con recursos que deben estar para un país que tiene las pretensiones de éste, recursos que deben estar a otro nivel.
Entonces, el reto es importante y también habrán dificultades importantes. Dificultades que tienen que ver con la forma en que se nos regule y se nos administra. Quisiera darles a conocer que la Contraloría General de la República está devolviendo al Ministerio de Educación el Decreto que contiene los Estatutos de la Universidad de Chile con una serie de objeciones. Objeciones que tienen que ver por ejemplo, con quitarle autonomía a esta institución para fijar su planta de personal, fijar sus remuneraciones y fijar sus políticas de desarrollo. Esta institución es concebida del punto de vista del derecho público, simplemente como un servicio público, cuando nosotros en verdad sabemos que esto es un poco más que un servicio público.
Nosotros tenemos otras responsabilidades día a día y por lo demás, como lo sabe el Vicerrector de Economía, no recibimos el cheque del 100 % de nuestro presupuesto desde el Ministerio de Hacienda. Entonces, dificultades vamos a tener, vamos a seguir enfrentando este problema de que cualquier iniciativa nueva, cualquier organización nueva, cualquier trabajo nuevo va a pasar cuatro, seis meses durmiendo en alguna instancia administrativa, pero tenemos que también saber vivir con esas dificultades. Tenemos que saber enfrentarlas proactivamente, y yo creo que vamos a salir adelante porque esa ha sido tradicionalmente la vocación de la Universidad de Chile, que independientemente de estos pequeños obstáculos que tienen más o menos intenciones, evidentemente que la universidad siempre ha salido adelante porque tiene la capacidad y la credibilidad en el país y en el sistema político nacional para ser una universidad con las categorías y los pergaminos que hemos acumulado en el tiempo y que haremos valer con todo su peso en estas discusiones.
De manera, queridos colegas, junto con desearles un feliz año a todos, quiero que este año también sea un año lleno de producción. Tenemos grandes cosas que están hoy día en el plato, está el Mecesup Dos, en el cual estamos comenzando a trabajar, está la nueva ley de acreditación que nos va a obligar a ponernos en primera línea para acreditar todos nuestros programas y carreras, tenemos que dar el ejemplo al resto del sistema. Está la línea del financiamiento para la innovación para la competitividad, tenemos también el nuevo sistema de financiamiento estudiantil que nos va a presentar nuevos retos, nuevos problemas y nuevas respuestas que tendremos que dar. Es decir tenemos una gran cantidad de tareas este año y la tarea de investigación figura número uno en todo esto.
Yo me alegro mucho de que en esta sala haya académicos de la Facultad de Artes, de la Facultad de Ciencias, de Odontología, de Ciencias Sociales, de Ingeniería, de Medicina; esto es la Universidad de Chile y yo me alegro mucho que esto ocurra, porque esto cuando no ocurre quiere decir que esta es una universidad en decadencia. La presencia de ustedes, la fuerza de ustedes, lo que esta escrito en ese libro, las discusiones que allí tuvieron lugar, muestran que esta es una universidad en crecimiento, con la fortaleza que debe tener para afrontar exitosamente el resto del siglo XXI.
Gracias por venir y si no los veo, felices vacaciones, un descanso merecido porque marzo va ser muy duro.
Gracias, hasta luego.