Discurso del Prof. Luis A. Riveros, Rector de la Universidad de Chile, en Ceremonia de Inauguración Dependencias Académicas y de Biblioteca Campus Centro.
(Transcripción)
Cuando me dijeron que hoy día se inauguraba el chunchito, yo no entendí, de qué se trataba. Me explicaron de qué se trataba y encontré que era un acto importante, porque como muy bien la presidenta del Centro de Alumnos expresaba, esto es un trabajo comunitario, con mucho esfuerzo de todos y creo que eso marca mucho el carácter que tiene el desarrollo de la Universidad de Chile. Nosotros no somos una universidad por utilidades o ganancias; somos una institución nacional y pública, y como lo nacional y lo público está tan debilitado hoy día como proyecto, como conformación de país, ciertamente que es nuestro esfuerzo el que debe primar para que estas cosas se hagan. Y si se examina toda la inversión pequeña o grande que en la universidad se ha hecho en los últimos años, ha primado fundamentalmente el esfuerzo de la propia universidad y de su comunidad. No ha sido el caso que alguien nos traiga los recursos y nos pongan las cosas aquí para que nosotros podamos disfrutar de ellas y llevarlas adelante. Pero yo creo que al mismo tiempo eso, que representa para uno ciertas preocupaciones, al mismo tiempo se convierten en estímulo porque eso fortalece lo más importante que tiene esta institución, que son sus recursos humanos desde muchas perspectivas. Yo me he dado cuenta como Rector de esta institución, claro que manejo una gran institución, de gran tamaño, de gran tradición, con una gran historia, que tiene un peso tremendo en la República y eso uno lo nota a cada paso que da. Pero si a mí me preguntaran qué es lo más importante y lo más distintivo de esta institución, diría que no es tanto su historia, ni su peso, ni su tradición, sino que son hoy día sus académicos y sus estudiantes, porque yo no tengo ninguna duda, ahí están todos los indicadores y no tengo para que repasarlos, sobre los académicos que tenemos, que son los mejores académicos del país, son los académicos que nos permiten que estemos entre las mejores universidades del mundo y, ciertamente, una universidad que puede tener muchos recursos para hacer desarrollo, inversión y mostrar bellos edificios al final del día lo que no pueden mostrar son académicos, y nosotros tenemos ésa que es una ventaja insustituible y, por lo tanto, nuestro reto es justamente obtener los buenos académicos y retener a los buenos académicos; eso es lo fundamental y lo segundo son los estudiantes. Porque nosotros tenemos estudiantes de la selección superior de todas las distribuciones de puntajes, de notas, etc., que existen y por lo tanto, todos los indicadores dicen que tenemos los mejores estudiantes. Cuando uno los conoce, yo creo que todos tenemos que conocer y yo me preocupo de hacer clases justamente para estar en contacto con los estudiantes, se da cuenta, además, de que tiene fantásticos seres humanos, no sólo máquinas repetidoras o máquinas inteligentes para hacer lo que tienen que hacer como estudiantes. Muchos se preocupan respecto al futuro de esta institución, preocupaciones que yo comparto respecto a lo que va pasar con esto de las universidades privadas, que han crecido, que tienen lindos edificios y hermosos avisos de colores en los periódicos, claro, esas cosas preocupan y a uno lo desalientan, porque en el fondo eso ha sido estimulado de alguna manera por la falta de una política apropiada para el desarrollo de la educación en Chile. Pero cuando uno mira la realidad interna pude decir que hay Universidad de Chile para rato, hay Universidad de Chile para rato porque están estos señores y estos caballeros que son los que hacen el trabajo en la universidad día a día. Aquí y en todas las facultades están ocurriendo cosas. Hoy día se están publicando en este mismo minuto, de acuerdo a nuestras tasas de publicación, cinco artículos de impacto internacional por parte de la Universidad de Chile. O sea, ésta es una universidad viva, como ha dicho también nuestra estudiante, una universidad que se mueve, que se concreta y que por lo tanto tiene un futuro que no va a ser difícil que podamos obtener, manteniendo por supuesto el empeño que mantenemos y con los estudiantes, porque evidentemente gran parte de lo que es esta universidad hoy día, son sus estudiantes, porque de aquí salen los egresados que mañana tendrán el liderazgo en el país. Cuando uno llega al parlamento de la República y los saluda, en todos los sectores políticos hay egresados de la universidad, o cuando los Ministros a uno le abren las puertas inmediatamente digamos, generalmente no con muchos resultados efectivos, pero le abren las puertas, es porque son egresados de la Universidad de Chile y la llevan en el corazón. Uno se da cuenta del enorme capital que tiene una universidad que no debe tratar a sus alumnos como clientes sino como estudiantes. Los clientes en esas otras universidades compran servicios, así como uno va al supermercado, pero la Universidad de Chile no funciona de esa manera, no debe funcionar de esa manera y por lo tanto, ya que ellos que van a ser los líderes del país mañana, van a ser los ministros de salud, van a ser los directores, van a ser los académicos, que van a liderar los temas de salud en el futuro. Evidentemente ellos garantizan que esta universidad tiene vida para rato y hay que mantenerla, y es por eso que hay que mantener los estándares académicos y darle los mejores espacios como esta biblioteca que es una biblioteca modesta, pero es lo que podemos hacer y, por supuesto, que es un salto importante respecto a lo que teníamos.
De manera que yo los felicito por esto, porque realmente muestra ese espíritu que hay en la universidad en donde nadie está aquí sentado tranquilo, de brazos cruzados esperando que pase el tiempo. Ésa no es la realidad y pueden recorrer cualquier facultad de la Universidad de Chile y encontrarán esta cosa fuerte de hacer cosas, de mejorar los proyectos, de hacer lo que estamos haciendo y mañana todavía mejor, y creo que esa también es una advertencia a los que creen que compiten con nosotros y que en realidad lo hacen con una competencia bien marginal. La competencia realmente nos estimula pero no nos preocupa, no nos sentimos amenazados. Acabamos de terminar el proceso de acreditación de la Universidad de Chile y la carta dice que la Universidad de Chile no tiene para qué compararse con otras universidades del país. Nosotros tenemos que compararnos con universidades en el resto del mundo, porque nuestro estándar está por encima de cualquiera otra que cree que compite con nosotros, con buenos o con malos argumentos. De manera que yo los felicito porque hoy día ustedes le han puesto una gotita más a esta enorme copa, que es el crecimiento de la Universidad de Chile en la materia sustantiva que importa, que son sus estudiantes y sus académicos. Por eso los felicito y hay que seguir adelante, hoy día con un chunchito y mañana probablemente con un chunchito dos o un chunchito crecido. Muchas gracias.