Discurso del Prof. Luis A. Riveros, Rector de la Universidad de Chile, en Ceremonia de Conmemoración del Cuadragésimo Octavo Aniversario del Colegio de Periodistas.

(Transcripción)

Quiero darles una bienvenida a este acto, un acto que celebra 48 años de una institución que tiene y ha tenido trascendencia importante en el país y por lo tanto, me ha parecido lógico y apropiado que esta celebración tenga lugar aquí, en el Salón de Honor de la Universidad de Chile. Éste no sólo ha sido uno de los lugares más tradicionales del trabajo académico regular, donde se gradúan muchos de nuestros profesionales, donde tienen lugar nuestros debates, nuestros trabajos, sino que también es un lugar que ha convocado muchas veces actos que tienen que ver con temas de ciudadanía, con temas de libertad, con temas de república. Ha sido éste, el Salón de Honor, un lugar en que durante muchas oportunidades hemos tenido la ocasión de mirar al país, de decir lo que creemos las distintas instituciones relevantes sobre el país y sus problemas, y en donde la universidad también ha podido reflexionar en torno a su tarea nacional y en torno a los problemas de país. Por lo tanto, ha sido también este Salón de Honor un espacio de libertad, un espacio de debate, un espacio de confrontación de ideas dentro del respeto de la vida académica y de la vida democrática y, por lo tanto, celebrar aquí los 48 años del Colegio de Periodistas es entonces una ocasión natural y lógica. Y es también natural y lógico que el Rector de la universidad, desde ésta tribuna haga también un llamado para que el Colegio de Periodistas siga en la línea de la defensa de la libertad de expresión, conculcada muchas veces de tantas maneras abiertas o encubiertas, de tantas maneras tradicionales y nuevas, pero de tantas maneras que de alguna forma hieren la sostenibilidad, la consolidación y el progreso de nuestra democracia. Quiero llamar también al Colegio de Periodistas a que sea nuevamente y se reposicione como el organismo que vele por la ética y que vele también por los fundamentos de una comunicación que sea lo que es toda buena comunicación: un acto de educación; y que, por lo tanto, el Colegio de Periodistas vuelva a ser también un instrumento fundamental en la formación ciudadana y un instrumento fundamental en la consolidación de las instituciones de la República.

Yo creo que celebrar estos 48 años del Colegio de Periodistas es, como toda celebración, una mirada al pasado, una mirada que debe dar reconocimiento de su contribución al país, pero también y sobre todo, es una mirada al futuro, una mirada a lo que viene en un país que tiene tantos méritos, tantos progresos y tantas cosas buenas, pero que al mismo tiempo levanta tantas preocupaciones por la manera en que muchas veces nos relacionamos y por la manera en que muchas veces provocamos los debates sobre los temas que nos conciernen. Creo que ahí la labor del periodista, la labor del comunicador, es singularmente importante y es por eso que el Colegio hoy día debe tener retos distintos, probablemente, a los que tuvo en el pasado, pero la misma tradición, en la tradición de compromiso, en la tradición de responsabilidad profesional, pero por sobre todo, en la tradición de libertad y democracia que siempre su trabajo inspiró.

En esta ocasión firmaremos también un convenio entre la Universidad de Chile y el Colegio de Periodistas. Un convenio que hemos debatido, que hemos conversado y que hemos concretado, porque nosotros como universidad haremos, desde aquí y aunque a muchos no les guste, todo lo que sea necesario para poder consolidar, para poder proteger y para poder avanzar en la consolidación de las instituciones republicanas de las cuales ésta es una de ellas. Por lo tanto, la alianza con el Colegio de Periodistas es una manera también de poder promover este trabajo, de poder promover este discurso universitario, de poder promover esta defensa en la cual esta institución ha estado siempre comprometida por el progreso de Chile, por Chile y su pueblo, como lo mencionó Bello en el acta fundacional, y por la responsabilidad que todos tenemos para proteger la libertad, la libertad de expresión y una democracia seria y sólida para el progreso del país. Muchas gracias a todos y bienvenidos a este Salón de Honor.

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