Discurso del Prof. Luis A. Riveros, Rector de la Universidad de Chile, en Ceremonia de Presentación del libro "Pueblos del Mar: relatos etnográficos", del Prof. Andrés Recasens.

(Transcripción)

Yo quería estar en la presentación de este libro porque para mí es muy importante que la labor de la Universidad de Chile sea integral. La semana pasada presentamos un libro sobre Química Teórica, el día de ayer un libro sobre Ingeniería Civil, hoy en la mañana uno sobre Tecnología Agrícola, y la próxima semana presentaremos uno sobre aplicaciones de Medicina en cuestiones de Nutrición. Entonces, es muy importante que las Ciencias Sociales estén presentes, porque muestran, y esperamos que la Universidad justamente la mantenga, esta diversidad en su trabajo académico, en su creación, y que no son solamente las ciencias y las tecnologías las dueñas del quehacer de la investigación en la Universidad, sino muy por el contrario, nuestro trabajo de investigación debe estar fuertemente también enmarcado en el quehacer de las disciplinas sociales, así como en la creación en artes y humanidades.

Pero al mismo tiempo es necesario reseñar la importancia que tiene esta obra, en mi modesta opinión, porque creo que nuestro país que planea tantos saltos, tantos procesos de integración, de interculturalización, tantos proyectos de desarrollo real, por así llamarlo, es un país que todavía no entiende los complejos problemas de su estructura social, los complejos problemas que demanda la segmentación de nuestra sociedad en los distintos grupos, las interrelaciones que se dan entre ellos y la manera en que estas interrelaciones afectan los proyectos globales. Somos una sociedad que quiere crecer, que quiere desarrollarse, que quiere saltar a la altura de este milenio, pero que todavía no se entiende a sí misma, y todavía no comprendemos qué nos está pasando. Es como el niño que crece sin saber siquiera dónde están cada una de las partes de su cuerpo. De manera que esta contribución a mí me parece importante como un llamado de atención hacia la comprensión del problema global de la sociedad chilena en este proceso de tránsito y de cambio tan violento, y que todos los días nos lleva a la preguntarnos qué será lo que nos está pasando. Basta ver lo que ocurre en los debates, basta ver lo que ocurre con nuestros medios de comunicación, basta ver lo que ocurre en los estadios; o lo que ocurre en los colegios, en los distintos segmentos de nuestra sociedad, para preguntarnos seriamente qué nos está pasando. Y eso ciertamente requiere hacer una pregunta un poco más allá, un poco más en serio que los diagnósticos usuales que vemos generalmente en los debates públicos. Pero al mismo tiempo, junto a esta gran pregunta que nosotros tenemos que ayudar a resolver, está el tema de qué énfasis pone el gasto en investigación, en ciencia y tecnología; de qué hace este país para abordar este tipo de problema. Este país subinvierte en investigación con menos de un punto del producto interno bruto dedicado a ella. Es un país que dedica todavía menos de un 10% en investigación en Ciencias Sociales, pues privilegiamos la investigación en tecnología y ciencia, pero despreciamos, por lo menos según lo visto en los hechos y en los números, lo que ocurre con nuestro imaginario, con nuestra creación, con nuestra contribución desde el punto de vista de las disciplinas sociales, que son tan importantes para entender lo otro. Porque de otra forma, sin estas disciplinas humanas en desarrollo más o menos en paralelo, como se ha planteado en muchas reuniones ¿quién entonces es el que pone las preguntas para el desarrollo del área material, del área de las llamadas ciencias duras?; ¿quién evalúa las respuestas? Por lo tanto, este desbalance que observamos en producción, pero que observamos también en las políticas de investigación, es un desbalance injustificable y tremendamente pernicioso para lo que podemos llamar respetuosamente el proyecto global de sociedad.

Me parece entonces que este esfuerzo es importante, va en la dirección correcta y yo llamo a que este esfuerzo tenga, también, mucho que ver con lo que mencionaba el Prof. Recasens (1): la necesidad de más trabajo interdisciplinario, porque tenemos que ir superando barreras de todo tipo para poder conectarnos mejor con las llamadas disciplinas duras; y en segundo lugar, para poder constituir realmente una armada más sólida de las disciplinas sociales y evitar que algunas se endurezcan más que otras para aparecer así más meritorias en el contexto de las evaluaciones, de los procesos de investigación, de sus resultados y de sus financiamientos.

Yo por eso quería estar aquí, porque creo que éste es un libro importante, de las tantas cosas que se hacen en esta Universidad y de las que nos sentimos siempre tan orgullosos por lo que significan para el país, por lo que contribuyen al pensamiento, a la creación, a la inteligencia. Creo que ésta es una ocasión particularmente importante por lo que significa como contribución de las Ciencias Sociales a entendernos mejor, pero sobre todo, en mi opinión, a encender esta luz amarilla de que algo está pasando, de que no estamos asignando correctamente los recursos para poder comprender mejor qué nos sucede, para poder dar este salto hacia el futuro.

Yo quiero felicitar a Andrés con mucho afecto, en mi opinión es un libro maravillosamente importante; me gustaría que tantos economistas pudieran ingresar a este mundo y tratar de entender que de alguna manera las cosas van mucho más allá de los equilibrios fiscales, mucho más allá de los temas del tipo de cambio, mucho más allá de los elementos de la política monetaria, y tienen que ver con la persona, con sus organizaciones, con sus sentimientos, con sus problemas más profundos y que, en definitiva, son los que justifican esos tránsitos sociales que desde otros ángulos disciplinarios, generalmente, no se entienden.

Felicitaciones, Andrés. Nosotros nos tenemos que retirar, porque tenemos un compromiso con el señor Decano (2), que es institucional, ciertamente, para terminar de celebrar los 161 años de la Universidad, pero queríamos estar aquí para decir presente, qué bueno que se publique este trabajo, qué bueno que se proyecte de esa manera, y ojalá nos dé, con los nuevos jóvenes que investiguen en estas materias, la oportunidad de amplificar nuestros criterios para que el salto sea de verdad y no un salto que en definitiva signifique volver atrás.

Muchas gracias.

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