Discurso del Prof. Luis A. Riveros, Rector de la Universidad de Chile, en Ceremonia Distinción al Mejor Docente, en el marco de las celebraciones del 161º Aniversario de la Universidad de Chile.

(Transcripción)

La docencia es la tarea más importante de esta Institución, y lo es por varias razones. En primer lugar, porque ustedes, señores profesores, en este mundo de la Educación Superior, en un mercado, son los que están más en la vitrina del mercado, porque ustedes son a quienes nuestros estudiantes observan más directamente y ustedes son el rostro de la Universidad, y esa exposición, ese contacto, lo que ustedes logran comunicar con ellos es, en definitiva, al final de esa clase lo que la Universidad les ha dicho, les ha entregado. Ustedes los convocan y ustedes deben producir en ellos lo mejor y, por lo tanto, ustedes son un elemento esencial de nuestro trabajo.

Es también la docencia, por cierto, un elemento fundamental para dar salida a nuestra investigación. Es que no por casualidad esta Universidad hace creación e investigación como uno de sus elementos más importantes y más decisivos en la conformación del trabajo universitario. Ustedes son quienes muestran en la sala de clases lo que está saliendo de los laboratorios, de los lugares de pensamiento, de las oficinas, de los cubículos de investigación, del diálogo con los ayudantes, de las tareas que se realizan con el medio externo: la docencia es un reflejo de la capacidad de crear de la Universidad.

Cada vez que nos preguntan, en qué se diferencia la Universidad de Chile de otras tantas instituciones que tienen el mismo nombre de "universidad", la respuesta es en dos cuestiones que son muy fundamentales. Una, que tenemos académicos, y eso significa tener profesores dedicados a enseñar, profesores que están ahí además de enseñar directamente en la sala, enseñar también más tarde, porque los estudiantes vuelven a preguntar y porque los estudiantes necesitan respuestas y orientación y somos una Universidad que provee además interdisciplina. Hoy día nuestros cursos de formación general les ofrecen a nuestros estudiantes, en donde estén, la posibilidad de mirar los temas de la biología, del derecho, de las matemáticas, de la economía o la administración. Ciertamente somos una Universidad que provee en la docencia.

Y la otra gran diferencia, es que somos una Universidad que hace investigación. Nuestros profesores escriben, publican, están obligados a mantenerse lo más cerca de la frontera del conocimiento y a empujarla si es posible. Eso hace la enorme diferencia entre ésta, que es una Universidad, y tantas otras que aspiran con buenos edificios, mucho vidrio, muchos colores y folletos magníficos que se publican en los diarios, y hasta propaganda en las micros, que son aspirantes a alguna vez llegar a convertirse en una institución que por lo menos de verdad en nombre se compare con la Universidad de Chile. Ustedes hacen en gran medida esa diferencia, y es cierto, hoy día nuestros lineamientos estratégicos dicen: "vamos a fortalecer el posgrado, porque allí está la generación del semillero de académicos para el futuro, para la Universidad y para el sistema", pero sabemos qué tipo de posgrados podremos hacer si no tenemos buenos pregrados y si el trabajo que ustedes realizan es un trabajo que no convoca, que no provoca a nuestros estudiantes para seguir adelante en la búsqueda de ideas y en la búsqueda formativa.

Por lo tanto, la labor que ustedes realizan es muy fundamental. Y en esta semana que ha sido una semana de variadas ceremonias, celebraciones y distinciones en que hemos premiado años de servicio, hemos premiado el comportamiento destacado de académicos por su contribución en creación y en investigación, hemos también premiado a nuestros Premios Nacionales y a nuestros egresados destacados, hemos también presentado un libro hermoso escrito por veintiún mujeres universitarias, hemos tenido realmente una semana de celebraciones, creo que esta ceremonia es precisamente la guinda que decora la torta, no sólo porque es lo más visible, sino porque es lo más importante. Los estudiantes han tenido en la nominación de ustedes como mejores docentes un rol fundamental. En qué otra parte ocurre eso; en qué otra parte son los estudiantes los que opinan justamente sobre la calidad de lo que reciben de la docencia, del trabajo de sus profesores, en el que hay un esfuerzo que se entrega y además una exigencia y quizás una antipatía también cuando tenemos que realizar muchas veces el trabajo docente con exigencia, pero ellos aprenden que al final del día la exigencia es justamente el valor que le estamos entregando y que agrega a su stock de conocimiento, de habilidades y de destrezas. Ustedes hacen todo eso, por lo tanto, esta ceremonia con la cual culmina la etapa de ceremonias de esta semana de la Universidad de Chile, culmina muy bien, una ceremonia con plena asistencia, una ceremonia que expresa el reconocimiento más merecido a quienes realizan ese ejercicio de estar dos veces a la semana al menos frente a un grupo para convencer, para recibir ideas y debatirlas, porque esta Universidad además no es un colegio, es una Universidad que debe procurar discutir con nuestros estudiantes, porque recibimos a los mejores estudiantes del país, porque hemos avanzado significativamente en los puntajes de admisión y lo vamos a seguir haciendo, porque somos la primera Universidad del país y eso es lo que ellos buscan y la respuesta de ustedes, en la exigencia, en el trabajo, en la enseñanza es, precisamente, entregarle ese convencimiento absoluto de que están en la mejor Universidad del país. Aquí no hay temas tabú, aquí todo tiene un espacio de discusión y todo tiene el liderazgo de ustedes que son los que deben llevar adelante esa discusión para crear nuevos profesionales no sólo capaces de entregar lo mejor con su esfuerzo productivo, sino que además sean buenos profesionales, porque formamos individuos críticos y capaces de tolerar la crítica que tanta falta hace hoy día en nuestra sociedad.

Nos sentimos tremendamente satisfechos, sabemos que todos aquellos que andan escarbando en nuestros basureros para ver qué es lo que publican en las páginas amarillas de los diarios, no van a poner esto como noticia destacada, pero en nuestros corazones, en el convencimiento de la comunidad académica y de sus autoridades, esta es una noticia destacada: ustedes son los mejores docentes y tenemos todos que aprender de ustedes de su esfuerzo, de su trabajo y de su entrega.

Muchas gracias.

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