El XII Congreso Mundial de la Asociación Internacional de Semiótica recibió más de mil investigadores provenientes de todo el mundo, reuniendo a los principales exponentes de los diferentes ámbitos de la semiótica. La asociación, fundada en 1956 en Francia, actualmente alberga a más de 100 asociaciones nacionales de semiótica.
En esta versión, realizada en la New Bulgarian University entre el 16 y el 20 de septiembre, se escogió a la nueva directiva de la organización. El investigador británico Paul Cobley, enfocado en comunicación cultural, fue quien obtuvo la presidencia, por una diferencia de 10 votos con la francesa Anne Henault que asumió como vicepresidenta. Kristian Bankov, organizador del congreso en Bulgaria, fue elegido secretario general. Rafael Del Villar fue electo como miembro del Comité Directivo que integra alrededor de 50 investigadores.
Para el académico Del Villar la importancia de estos congresos radica en "desarrollar la disciplina en todo el mundo, y al mismo tiempo detectar la acumulación del saber generado y/o generándose en distintos espacios socioculturales. Los congresos son una instancia de ligazón entre toda la gente que hace semiótica y el diagnóstico de la coyuntura teórica", afirmó.
La expansión de la semiótica
"La semiótica llena una necesidad. No había una herramienta, una metodología para analizar científicamente el sentido que se expresa en los mensajes, tanto visuales como lingüísticos. La expansión de la disciplina responde a que la semiótica llena esta necesidad", explica el profesor Del Villar.
Esta expansión se ha producido en la medida que los mercados y la economía y las comunicaciones se han vuelto cada vez más multinacionales. En Chile, por ejemplo, al insertamos en las economías de mercado globales se expandieron con más fuerzas las escuelas de diseño.
El investigador de la Universidad de Chile señala que "dentro de las expansiones de mercados, se necesita la semiótica para saber qué expresan los mensajes que van en los envases de los productos e incluso, visto publicitariamente, la estructura misma del producto. Haces un producto pensando en qué ensoñación va a generar en el sujeto, al mismo tiempo las comunicaciones en un mundo global se complejizan pues no todas las culturas visuales son similares, perciben y procesan cognitivamente la información en forma diferente".
"Hay un desarrollo expansivo de la semiótica en comunicaciones porque, además, los candidatos en una campaña no implican con ideas sino que con imágenes. Antes tenías un saber discursivo y buscabas un diseñador que le pusiera algo estético, ahora se necesita entender el inconsciente que se expresa en los mensajes, lo que remite a una semiótica antropológica, en interrelación estrecha con las ciencias cognitivas y el psicoanálisis", agrega Del Villar.
Investigación en videojuegos y navegación
De sus investigaciones en semiótica el profesor Rafael Del Villar destaca aquella que aborda los dibujos animados. "Marca un hito porque capta que la gente lee a partir de la videocultura a la cual pertenece, los dibujos animados son un primer anclaje. La misma forma en que se procesa la información en el comics o en el manga es como se procesa la vida. No son solamente lectores de dibujos animados, son lectores de CDs, sitios web en internet, videojuegos", señala.
"Desarrollamos la investigación en videojuegos porque es empírica. Es muy difícil saber cómo estás interpretando una película, porque tendrías que hablar sobre la película, en cambio es mucho más fácil ver cómo interpretas un videojuego porque si te grabo al jugar, lo puedo ver en la práctica".
El paso siguiente en su línea de investigación fue la navegación en internet. "Si yo quería estudiar las formas de mirar y las formas de procesamiento cerebral de la información en diferentes etapas de la vida, en realidad el videojuego restringía a los más chicos y jóvenes, pero todos navegan por internet. Tomamos los videojuegos y la navegación porque son instancias que permiten ver cómo tú construyes tu realidad, no es una representación, sino la lectura que tú haces", explica Rafael Del Villar.