Movilidad Nacional Estudiantil

Estudiantes de la Universidad de Chile hacen su práctica en centro de investigación en Magallanes

Estudiantes de la Universidad de Chile hacen su práctica en Magallanes
Medio plano de Matías Cuevas, con mochila, en en el circuito Dientes de Navarino, en medio de cimas nevadas y con una laguna detrás.
“Ha sido una experiencia espectacular (...) ha sido un aprendizaje constante (...) Podría estar una hora nombrando cosas que me gustaron", comenta Matías sobre su práctica en Magallanes, donde extendió su estadía para hacer su memoria de título.
Plano medio corto de Francisca Coloma sonriendo y de fondo un bosque.
Francisca cuenta que su experiencia “fue muy enriquecedora. Estar inserta en un centro de investigación rodeada de personas especialistas en las diversas áreas de la tierra y además en la zona más austral de nuestro país, con una gran biodiversidad de ecosistemas, fue un continuo aprendizaje".

El Programa de Movilidad Nacional Estudiantil del Consorcio de Universidades del Estado de Chile (Cuech), que desde el 2017 entrega la posibilidad de postular a actividades académicas en cualquiera de sus 18 instituciones, tiene sus postulaciones abiertas para el segundo semestre 2024, hasta el próximo 31 de mayo. En este contexto, Matías Cuevas y Francisca Coloma, quienes apoyados por este programa acaban de realizar su práctica profesional en el Centro de Internacional Cabo de Hornos (CHIC) de la Universidad de Magallanes (UMAG), cuentan su experiencia y motivan a más estudiantes a aprovechar la oportunidad y moverse por Chile. 

Matías y Francisca están en quinto año de Geografía en la Universidad de Chile y a través de otras compañeras y compañeros que habían realizado actividades académicas en la Universidad de Magallanes, se enteraron del Programa de Movilidad Nacional Estudiantil, que permite hacer prácticas, pasantías, tesis cotuteladas y semestres académicos en las distintas universidades estatales del país. Se animaron, hicieron las gestiones necesarias y este primer semestre realizaron su práctica profesional en el extremo sur de Chile. 

Aprendizaje constante

Ha sido una experiencia espectacular”, comenta Matías, quien aún sigue en Magallanes, ya que extendió su estadía para hacer su memoria de título. “Conocer gente muy genial, practicantes, investigadores e investigadoras, personas que viven aquí en Williams; aprender todos los días algo nuevo de temas que uno no se espera; poder salir a terreno en este ambiente, ver muchas aves, líquenes, etcétera. Sí, ha superado mis expectativas la verdad. He tenido la oportunidad de colaborar en muchos otros proyectos que ni pensaba antes de venir, así que ha sido un aprendizaje constante en muchos temas que son súper interesantes”.

En la misma línea, Francisca señala que su experiencia “fue muy enriquecedora. Estar inserta en un centro de investigación rodeada de personas especialistas en las diversas áreas de la tierra y además en la zona más austral de nuestro país, con una gran biodiversidad de ecosistemas, fue un continuo aprendizaje (...) no me había imaginado tal experiencia, como lo fue al llegar allá, la práctica profesional superó mis expectativas”. 

Ambos dicen que valoran por sobre todo a las personas que pudieron conocer, “siempre con disposición de ayudar”, indica Matías. “No solo fueron compañeros de trabajo, de estación de campo o mi profesora guía, sino que encontré personas con las cuales me vinculé, generando amistades”, puntualiza Francisca. Además de las personas, Matías destaca de la experiencia “poder aprender un poco de la cultura yagan y su historia; los paisajes son hermosos, hay mucha variedad de aves que uno puede ver todos los días, al igual que los líquenes. Podría estar una hora nombrando cosas que me gustaron”.

Respecto al aporte de esta práctica, en otra región, a su formación profesional, Matías enfatiza que permite “ampliar la mirada que tiene uno que estudia en pleno Santiago Centro, y dar cuenta de cómo es la realidad en otros lugares, sobre todo en uno tan aislado como Puerto Williams, conocer cómo se hace investigación y ciencia. Sumado a todo eso, la ubicación tan extrema de aquí le da todo un valor agregado a lo que he ido haciendo”.

“Esta experiencia aporta de manera directa a mi formación profesional”, añade Francisca, “mostrándome de lleno una de las áreas laborales en las cuales podemos desempeñarnos, que es el área científica, en donde ves a los investigadores desenvolverse en diez o más proyectos a la vez, moviéndose de una región a otra, de terreno en terreno y relacionándose con las comunidades locales y sus actores; que es gran parte de lo que desarrollamos en Geografía: observar y analizar el espacio, yendo a los territorios y coconstruyendo el conocimiento a partir de todos los actores involucrados”.

¿Recomiendan la experiencia? Claro que la recomiendan, expresan ambos. Te permite “ir a regiones tan distantes, conocer otras realidades y aprender de otros territorios”, plantea Matías. “Es una oportunidad única, que te permite vincularte con otra casa de estudio en otro lugar del país”, agrega Francisca. Y como consejo, Matías recomienda que “busquen harto los diversos laboratorios y centros de investigación asociados a las distintas universidades, ya que hay harta variedad para elegir y encontrar algo que les llame la atención”.

Para quienes deseen postular

“Buscamos que cada vez más estudiantes de la Universidad de Chile, como Matías y Francisca, puedan aprovechar la oportunidad de realizar sus prácticas profesionales, un semestre académico, una tesis cotutelada u otras actividades académicas a lo largo del país, a través de este programa que nos consolida como sistema de universidades estatales y nos compromete, incluso legalmente, a trabajar en conjunto”, enfatiza la directora de Pregrado Leonor Armanet, quien anima a las y los estudiantes a indagar, preguntar y postular a la Movilidad Nacional Estudiantil, “una experiencia que, sin duda, estimula aprendizajes significativos en contextos formativos diversos y que implica distintos desafíos no solo académicos, sino que también culturales, sociales, personales y emocionales”.

A Movilidad Nacional Estudiantil pueden postular estudiantes regulares de pregrado de todas las facultades de la Universidad de Chile, con un avance académico superior al 2º semestre. Además de una experiencia única, este programa tiene ventajas como el reconocimiento en la carrera de origen de las actividades curriculares, antes de iniciar la Movilidad; costo cero de arancel y matrícula en la universidad de destino, permaneciendo como estudiante de la Universidad de Chile; mantención de becas o gratuidad, en caso de tener estos beneficios y un apoyo económico para el traslado a la universidad de destino y mantención en el período definido.

Quienes se animen a postular para realizar su movilidad presencial durante el segundo semestre de 2024, en cualquiera de las otras 17 universidades estatales del país, podrán hacerlo hasta el próximo viernes 31 de mayo.

Para conocer todos los detalles, la invitación es a visitar la página oficial de la convocatoria: Movilidad Nacional Estudiantil.