Durante la conversación, la Dra. Natalia Inostroza recordó sus primeros años escolares destacando la importancia de la educación pública en su formación profesional. “Soy hija de la educación pública. Estudié en el Liceo 8 de San Miguel, actualmente Liceo Betsabé Hormazábal de Alarcón. Mi papá es un convencido de la educación pública toda su vida”, señaló.
También contó cómo sus intereses fueron orientándose hacia el área de las ciencias. “Me gustaba harto leer, la música y la matemática, pero era notoria la diferencia en mis notas en física y química. Me gustaba la curiosidad, el laboratorio, las preguntas y finalmente por ahí me fui encaminando. De chica quería ser como Marie Curie”.
La Dra. Inostroza también recordó la preocupación de su familia asociada a seguir una carrera científica en Chile. “Uno sale del colegio teniendo ideas muy vagas de lo que podría llegar a hacer en el país. A los papás también les preocupa qué vas a hacer en ciencia en un país donde es tan difícil”.
El Decano, Dr. Raúl Morales, complementó esta reflexión señalando que “las ciencias y las artes siempre han sido áreas complejas de entender como profesiones desde la mirada de los padres. El país no reconoce con la misma amplitud las carreras liberales, por lo que optar por ciencia suele ser un motivo de conversación familiar”.
Otro de los temas abordados en el programa fue la experiencia de la profesora en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas de España (CSIC). “Planteé una idea de investigación para mi tesis de doctorado que no tenía mucho desarrollo en Chile, por lo que contactamos grupos en el extranjero y comencé viajando durante varios años a Madrid para trabajar y formarme en el área”.
El Dr. Raúl Morales destacó la importancia del rol del CSIC como una institución dedicada a la investigación científica. “Es un tipo de institución que Chile no tiene. En países como España o Francia, la ciencia se desarrolla en institutos que producen conocimiento y también productos con alto valor agregado, no solo como entidades formativas”, explicó.
Finalizando el programa, la académica se refirió a su libro “¿Y si somos alienígenas? Un viaje por la química del universo”, un libro sobre astroquímica dedicado a niñas y niños donde invita a reflexionar sobre el origen de la vida. “Busco que los lectores puedan responderse esa pregunta. A lo largo de ocho capítulos presento evidencias de que muchas de las cosas que existen en el universo están intrínsecamente relacionadas con lo que entendemos como vida”, concluyó.
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