¿Cómo cuidar el dinero este fin de año?

Especialistas aconsejan no gastar más de lo que se tiene, no endeudarse y planificar frente al actual momento económico

Especialistas entregan consejos para cuidar el dinero
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En lo práctico, además de no endeudarse, tratar de no usar la tarjeta de crédito, ni las de casas comerciales, y se la va a usar pagarla dentro de los 30 días.
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El consejo es ajustar los presupuestos, por lo menos dentro de los próximos seis meses, de manera de poder equilibrar lo que se recibe de sueldo con lo que se está gastando.

El Banco Central anunció recientemente que subirá la tasa de política monetaria ¿Qué significa eso? Que todos los créditos de consumo, las tarjetas de crédito y todo aquello que está en crédito, ya sea hipotecario, de consumo o lo que pagamos por usar la tarjeta de crédito, va a ver incrementado su costo. Por lo tanto, hoy día el pedir prestada plata a las entidades financieras o usar crédito será mucho más caro de lo que era hace un mes atrás.

El profesor Jorge Berrios, director académico del Diploma en Finanzas Unegocios de la Facultad de Economía y Negocios (FEN) de la Universidad de Chile, afirma que vamos a entrar en una recesión de aquí a final de año y eso se debe a factores tanto locales como internacionales. Por lo tanto, hay que prepararse para esa circunstancia o ver qué hacemos para poder manejar mejor nuestros recursos ante estos escenarios que se vienen.

“El primer consejo que le puedo dar a una persona para que cuide el dinero en estos momentos es que no gaste más plata de la que tiene. No es tiempo de endeudarse porque está muy caro endeudarse, no es tiempo para gastos más allá de lo que los presupuestos familiares pueden soportar, salvo que sean temas médicos o de otra índole. Y es tiempo de ser más conservador en lo que se refiere al uso de nuestro dinero y de nuestra plata o nuestros sueldos”, dice el profesor Berríos.

En lo práctico, además de no endeudarse, tratar de no usar la tarjeta de crédito, ni las de casas comerciales, y si la va a usar, pagarla dentro de los 30 días, de manera de que no le quede capital insoluto y entre a tasas que hoy día están muy altas. Y si es imprescindible comprar bienes, aprovechar las ofertas que llegarán a fin de año en las tiendas, pues habrá liquidación de stock.

“Postergue por algunos meses, de aquí hasta mediados del próximo año, todas aquellas inversiones que sean superfluas o que no sean realmente necesarias. Aproveche algunas ofertas que se van a dar, sobre todo a final de año, porque muchas de las casas comerciales van a liquidar stock. Vendrán muy buenas ofertas, sobre todo las liquidaciones de final de año de las tiendas de retail”, agrega el académico.

Por otro lado, estamos con un proceso inflacionario que ha repercutido con más fuerza en la canasta familiar. Entonces, el consejo es ajustar los presupuestos, por lo menos dentro de los próximos seis meses, de manera de poder equilibrar lo que se recibe de sueldo con lo que se está gastando.

“Y, sobre todo, una regla muy básica, no gaste más de lo que tiene, y si tiene una necesidad que sea imperiosa o que sea realmente necesaria, le sugiero hágalo a través de un crédito de consumo o hágalo a través de los créditos que entregan las cajas de compensación, que hoy día están en muy buenas condiciones, y eso lo pueden hacer dentro de la empresa. Se lo descuentan por planilla y no requieren tantos requisitos como los bancos. Se vienen tiempos complicados, pero las complicaciones las hace uno mismo y ahí está lo que uno debe hacer en tiempos complicados: son tiempos de ser más conservador, no gastar más de lo que uno tiene y, sobre todo, cuidado con el endeudamiento”, aconseja el profesor de la FEN.

En tanto, la profesora Lorena Pérez Roa, profesora de Trabajo Social de Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile, dice que el dinero, de la manera en que lo observan desde las ciencias sociales, se entiende como una relación social. Entonces, como tal, hay que entenderlo con distintos usos y significados, es decir, la gente le va asignando un valor o un uso específico al dinero.

“Esto quiere decir que no todos los gastos los asumimos de la misma manera. Hay gastos que nos hacen felices, otros que nos aprobleman. Y esa relación que tenemos con esos gastos o con ese uso del dinero es independientemente del costo del gasto. Así, por ejemplo, durante el 18 de septiembre, todos sabemos que la carne sube y subió mucho más a propósito de los costos de la inflación este año. Sin embargo, la gente la compró igual, y en el fondo considera que eso es algo válido, que vale la pena hacerlo en función también de poder disfrutar un espacio con los amigos y la familia. Ahora, esto no quiere decir que la gente no ocupe técnicas. La gente compró la carne antes, la congeló o buscó maneras de poder ahorrar esa plata, pero ese gasto se hizo igual, independiente a que podría haber sido, entre comillas, tipificado como un gasto no necesario, porque para la gente significa algo que es importante y, por ende, lo va a hacer igual”, explica la profesora Pérez Roa.

Entonces, hoy sucede que los gastos que consideramos normales, como los gastos básicos, los arriendos o la alimentación, son los que están subiendo producto de la inflación. Por lo tanto, se hace necesario desarrollar ciertas estrategias para poder abordar los gastos, aunque para celebraciones como Navidad y Año Nuevo, en general, seguimos gastando porque son cosas que significan mucho en la vida de los hogares chilenos.

“Ahora bien, ¿cómo poder ahorrar o cómo poder repensar los gastos de fin de año? Yo creo que en este contexto lo más importante es poder planificar y eso implica poder definir los montos antes de hacer los gastos, es decir, cuánto uno va a disponer para la cena, con cuánto uno va a disponer para los regalos, cuánto uno va a disponer para la fiesta de fin de año, de manera de adecuar los gastos a ese presupuesto y no al revés. En general, lo que uno hace es primero desear y después mirar cómo va a poder financiar eso. En estos contextos, donde efectivamente la plata vale menos, es mejor poder definir montos fijos que te permitan manejar y desarrollar estrategias como para poder adecuar los gastos a esta planificación financiera”, indica la académica. 

Advierte, de todas maneras, que cuidar el dinero no significa privarse de cosas o actividades que nos generan placer o felicidad. “También no privarse, en términos estrictos, entendiendo que son fechas que son importantes y que están asociadas a mucho goce y disfrute, sobre todo después de años difíciles como han sido los últimos años. Más que privarse de eso, intentar adecuarlos un poquito más al contexto y con eso poder organizar mejor los gastos”, recomienda.