Como cada año, la comunidad de la Universidad de Chile se reunió para renovar su compromiso con los derechos humanos y la memoria, a partir de una ceremonia instituida por el plantel como parte de sus actividades oficiales. En esta oportunidad, la institución otorgó ocho nuevos títulos póstumos y simbólicos a los estudiantes de la Facultad de Derecho Littré Quiroga Carvajal, Héctor Mario Silva Iriarte, José Tohá González, Guillermo Osvaldo Vallejo Ferdinand y Fernando Abraham Valenzuela Rivera; y a los estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales Manuel Donoso Dañobeitia, Carlos Salcedo Morales y Dagoberto Pérez Vargas.
En la instancia, además, se hizo entrega oficial de la primera Medalla Derechos Humanos y Democracia, nueva distinción que en esta oportunidad recayó en la presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, Alicia Lira.
A la cita por el Día de los Derechos Humanos y la Memoria en la Universidad de Chile asistieron, entre otras autoridades gubernamentales y universitarias, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero; el ministro de Educación, Nicolás Cataldo; el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes; y la ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Antonia Orellana.
El acto se desarrolló en el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado y de la "Semana del Nunca Más", ciclo impulsado bajo el lema “Educación para la democracia” en el que se han organizado una serie de actividades artísticas, culturales y de reflexión. A esto se suma la participación de la Universidad de Chile en la presentación del Plan Nacional de Búsqueda Verdad y Justicia, cuyo decreto fue suscrito por el Presidente Gabriel Boric y el ministro Cordero el pasado 30 de agosto.
Ante un Salón de Honor repleto de familiares y amigos de las y los homenajeados, además de la presencia de la comunidad universitaria, la Rectora Rosa Devés expresó, a nombre del plantel, “nuestro más completo compromiso con el Plan Nacional de Búsqueda Verdad y Justicia, política pública a la cual hemos sido convocados a sumarnos como universidad. Contribuiremos con todas nuestras capacidades académicas pertinentes al esclarecimiento de las verdades que aún permanecen ocultas”. Junto a esto, reiteró “nuestro compromiso con la defensa de la educación pública como un lugar donde podemos aprender y convivir como iguales bajo los valores comunes”.
“Reafirmamos también nuestro compromiso de fortalecer una educación centrada en los derechos humanos, que no se limitará a entregar ciertos contenidos académicos sobre estas materias, sino que trabajaremos para fomentar una convivencia basada en el pleno respeto de los derechos humanos”, señaló la máxima autoridad de la Casa de Bello. Manifestó, además, “el compromiso de avanzar en reparación y reconocimiento dentro de nuestra propia institución en lo referido a las expulsiones y a las exoneraciones de miembros de nuestra comunidad durante la dictadura”.
“Esta semana nos hemos propuesto conmemorar, vale decir, recordar juntos, incitar a la reflexión y al pensamiento crítico, pero -ante todo- comprometernos con la creación de una ciudadanía comprometida con la democracia. ‘Educación para la democracia’ es nuestro lema. En otras palabras, ‘educar para que nunca más’”, señaló por su parte la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Pilar Barba.
Títulos póstumos y simbólicos
El 11 de abril de 2018, se realizó la primera ceremonia de entrega de distinciones universitarias de título póstumo y simbólico; y de grado académico póstumo y simbólico a estudiantes detenidos desaparecidos y ejecutados políticos de la U. de Chile, ocasión la que se entregaron 101 distinciones. Luego, el 11 de septiembre de 2018, se sumaron 11 distinciones más. Un año depués, el 9 de septiembre del 2022, se hizo una nueva entrega al estudiante Luis Mahuida Esquivel.
En la ceremonia de este año, los familiares de los estudiantes de la Facultad de Derecho recibieron la distinción de manos del decano Pablo Ruiz-Tagle; mientras que en el caso de los familiares de los estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales esta labor estuvo a cargo de la decana de dicha unidad académica, Teresa Matus.
Al inicio de esta emotiva ceremonia, el coordinador académico de la Cátedra de Derechos Humanos de la U. de Chile, Claudio Nash, sostuvo que "no podemos olvidar que cada uno de ellos y ellas son nuestros estudiantes, quienes nos fueron arrebatados por el terrorismo de Estado, son vidas mutiladas. Este ha sido concebido siempre como un acto de reparación destinado a restablecer el lazo roto entre las familias de estos estudiantes y esta, su comunidad universitaria".
El académico reflexionó, por otra parte, en torno al momento actual que vive Chile. "Cómo no preocuparnos hoy si las bases estructurales que provocaron las movilizaciones de protesta no solo siguen vigentes, sino que se han profundizado en los últimos años. Vivimos sobre una falla tectónica y social y no sabemos cuándo, pero sí que el piso se nos volverá a mover. Una falla no tiene solución, la otra sí".
Distinción Medalla Derechos Humanos y Democracia
Otro momento de la ceremonia fue la entrega de la primera distinción “Medalla Derechos Humanos y Democracia”, creada por la Universidad de Chile con el propósito de promover las garantías de no repetición y memoria. La destinataria del reconocimiento, Alicia Lira, fue elegida por un jurado presidido por la Rectora de la Universidad de Chile, Rosa Devés, e integrado por la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Pilar Barba; el director (s) del Centro de Derechos Humanos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, Felipe Abbott; el Profesor Emérito, Patricio Aceituno; la profesora y Premio Nacional de Periodismo 2007, Faride Zerán; y la presidenta del Directorio de la Fundación Museo de la Memoria y los Derechos Humanos, Marcia Scantlebury.
Presentando a la homenajeada, Faride Zerán, Profesora Titular de la Facultad de la Comunicación e Imagen (FCEI), afirmó que esta medalla fue entregada a Alicia Lira “por su convicción, valentía y resistencia contra la dictadura civil-militar”, y por su contribución “de manera sostenida a la defensa de los derechos humanos, por su histórico trabajo en la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, por las demandas de verdad y justicia, pilares fundamentales en favor de la convivencia democrática”. La académica sostuvo también que es merecedora del reconocimiento debido a su “incansable labor de denuncia de todo acto que atente contra la dignidad y derechos fundamentales de las personas, tanto en el presente como en el pasado, y por los aportes realizados en los procesos de reparación que ha llevado adelante la Universidad de Chile”.
“No puedo dejar de entregar parte de esta medalla a los familiares de la Agrupación de Familiares de Presos Políticos en dictadura, que fue una agrupación mística, solidaria”, dijo Lira luego de recibir la medalla de manos de la Rectora Devés. De esta forma, relevó el trabajo colectivo de las organizaciones en las que ha participado. “Cuando uno tiene un sueño colectivo y no es utópico, uno sabe caerse, llorar, pararse y reírse y seguir con más fuerza adelante”, dijo.
La homenajeada también recorrió su historia como luchadora social, momento en el que manifestó sentirse afortunada y orgullosa de su trayectoria. “He tratado de ser solamente una buena persona, pero una persona con valores, con consecuencia, con principios y una enorme humanidad y solidaridad”. En este sentido, planteó, “mi alma de obrera textil siempre aflora, por lo cual, insisto, quiero agradecer a todos lo colectivos en los que he estado”.
Una vez recibida la distinción, el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, destacó que “el trabajo que estamos emprendiendo [el Plan Nacional de Búsqueda] tiene como base fundamental la participación de las organizaciones de familiares y sus propuestas. Esta distinción que hoy recibe es completamente merecida y releva el papel de ella y sus representados”. Junto a ello, abordó la necesidad de que el Estado asuma su responsabilidad, materializando su respuesta en este Plan. “Fueron sus funcionarios, fue su política represiva y fue el Estado en su conjunto quien cometió esos crímenes. Es el Estado el que tiene que hacerse cargo de ellos”, expresó el ministro.
Desde la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Gaby Rivera, revisó estos 50 años en que han debido “retomar la lucha las hijas e hijos de quienes partieron, tratando de llevar esta lucha que ha sido larga, porque pareciera que fue ayer que perdimos a nuestros familiares, porque eso es la desaparición forzada, una tortura permanente”. Agregó a esto su agradecimiento a la Universidad de Chile “y a todo el equipo que ha tenido el compromiso con las organizaciones y sus estudiantes, bajo el hecho de reconocer a quienes no pudieron terminar su carrera, ni se les pudo entregar físicamente su diploma, el que hoy se entrega a sus familiares".
En palabras de Raquel Roa, secretaria de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, esta ceremonia reafirma la necesidad de educar a las y los jóvenes sobre los momentos de violencia política y de terrorismo de Estado de nuestro país. Para Roa, estas conmemoraciones reflejan una mirada de respeto y valoración de los derechos humanos, de diálogo y de defensa de la democracia, de memoria y sensibilidad ante la injusticia. “Elevar la figura de aquellos jóvenes y distinguirlos con sus títulos académicos es parte de la nueva educación que debe surgir después de un largo periodo de desprecio a la vida, de desmantelamiento de las instituciones, de negación de los crímenes y de crueles intentos por anular las ideas y las esperanzas de nuestros familiares”, señaló.
El encuentro contó con la participación musical de la cantautora mapuche y feminista Daniela Millaleo, quien en su guitarra y voz interpretó algunas canciones como Dónde están y Nacido indio. Además, se hizo presente la Camerata Vocal de la U. de Chile, dirigida por el profesor Juan Pablo Villarroel.
También fueron parte de este encuentro la Prorrectora Alejandra Mizala; el vicerrector de Asuntos Académicos, Claudio Pastenes; el vicerrector de Investigación y Desarrollo, Christian González-Billault; la vicerrectora de extensión y Comunicaciones, Pilar Barba; la vicerrectora de Asuntos Estudiantiles y Comunitarios, Josiane Bonnefoy; el subsecretario de Educación Superior, Víctor Orellana; la diputada Claudia Mix, además de integrantes del Consejo y Senado Universitario, estudiantes y trabajadoras y trabajadores, y miembros del cuerpo diplomático.
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