Bajo la coordinación del eje de Ecosistemas y Género del programa Ciencia 2030 de la Universidad de Chile, estudiantes de postgrado, académicas e investigadoras de la Facultad de Ciencias crearon la Red de Investigadoras y Académicas (RIAC) de esta unidad académica en 2021, una iniciativa impulsada con el objetivo de visibilizar el trabajo y trayectoria académica de las mujeres, fortalecer su liderazgo e impulsar una mayor equidad de género en el desarrollo de las ciencias e innovación.
Ecosistemas y Género del programa Ciencia 2030 desarrolla una serie de acciones para promover la participación y el liderazgo de mujeres en las facultades de Ciencias, Ciencias Químicas y Farmacéuticas, Ciencias Agronómicas y Ciencias Veterinarias y Pecuarias. De esta forma, para cumplir su propósito, este eje ha desarrollado iniciativas de distinta índole, siendo una de ellas la creación de RIAC en la Facultad de Ciencias.
Beatriz Barra, coordinadora de Ecosistemas y Género de Ciencia 2030, señala que desde su creación se ha avanzado hacia “una gobernanza horizontal, transparente, representativa e interdisciplinaria que apunta a contribuir a las transformaciones culturales, así como también a la modernización institucional”.
En la misma línea, la académica y directora del Departamento de Biología de la Facultad de Ciencias e integrante de RIAC, Claudia Stange, destaca que “se buscan relaciones más allá de lo laboral, se busca transmitir nuestra experiencia para que las otras generaciones no tengan que sufrir lo mismo”.
Trayectoria
Desde su creación a fines del 2021, con Isabel Marchant en el liderazgo de la organización, se gestionó un espacio de encuentro entre académicas e investigadoras de la Facultad de Ciencias. En su primer hito de encuentro, se abordaron las propias experiencias, necesidades, proyectos de trabajo, propuestas de colaboración y creación de redes entre las profesionales. Desde entonces, la tradición de reunirse a tomar té y abordar temas comunes sigue vigente mes a mes.
“La primera vez que nos vimos presencial llegamos unas 25 y empezamos a conversar de lo que nos pasaba, de lo que tenía que ver con el patriarcado, la desigualdad de género y cuáles eran nuestras experiencias. Nos percatamos que a distintas generaciones les pasa lo mismo, incluso profesionales o profesoras titulares de gran trayectoria”, indica la profesora Stange.
La académica señala también que su participación se debe al desmedro general que sufren las mujeres en el área. “En el fondo, es una acción que viene acompañada de todo el movimiento del 2018 por la equidad de género, por lo que fue natural sumarme a esto. Yo tuve como una revelación en este caminar, porque el participar de la RIAC y del InES Género, el ir a estas instancias y charlas, me abrió mucho la mirada. Me di cuenta de que tenía una postura en la cual estaba normalizando todo”
Luego, comenzaron a realizar espacios de aprendizaje en torno a la articulación de la ciencia y el feminismo, talleres en temáticas como oratoria, liderazgo para científicas y educación científica con perspectiva de género, bienvenidas a nuevas estudiantes de postgrado y reconocimiento a la trayectoria de académicas e investigadoras destacadas.
Durante sus dos primeros años, RIAC ha desarrollado acciones orientadas a impulsar políticas de género en reconocimiento. Así lo explica Beatriz Barra, quien se desempeña como coordinadora de Ecosistemas y Género desde septiembre del 2023. “Estas políticas abrieron la posibilidad de visibilizar los aportes de las mujeres científicas en la Facultad, lo que no tenía una visibilidad justa por distintos motivos. En este sentido, destacamos su valentía intelectual, pese a la identificación de obstáculos culturales e institucionales que experimentaron”, sostiene Barra.
Para la coordinadora de Ecosistemas y Género, estos primeros años han sido fructíferos, pues han servido para “reconocernos e instalarnos como un espacio en potencia de participación democrática que da cabida a distintas posiciones respecto a las temáticas y necesidades que nos convocan”.
Abrir la mirada
Participar en una instancia donde existe diálogo intergeneracional y todas las voces son escuchadas es parte de las motivaciones de las integrantes de RIAC. Sobre el trabajo de este espacio, Beatriz Barra afirma que se debe “valorar la relevancia de mantener actualizados los diagnósticos de género locales, incidir de forma situada, enfrentar de modo asertivo las resistencias estructurales y culturales presentes en la institución, facilitar los diálogos abiertos para desmitificar qué es la perspectiva de género y valorar las políticas institucionales para iniciar procesos de concientización más profundos”.
Por otro lado, intercambiar experiencias con otras científicas le ha permitido a Stange darse cuenta de que a mujeres de distintas generaciones les pasa lo mismo, “incluso profesoras que son top en lo que hacen, de una trayectoria nacional e internacional de vanguardia, siguen sintiendo estos desajustes”, comenta. En este sentido, enfatiza la importancia de generar consciencia en torno a las acciones que replican inequidades de género.
La profesora Stange menciona, además, que el espacio le ha permitido identificar conceptos relacionados con situaciones tales como el mansplaining, síndrome del impostor y síndrome de la abeja reina, “términos que se asocian con actitudes y experiencias que uno vive en la desigualdad de género. Yo las normalizaba pensando en qué estaría haciendo mal, no que el entorno era desigual”, reflexiona.
Proyección a futuro
Las integrantes de RIAC vislumbran un futuro prometedor para la organización a partir de las múltiples propuestas que buscan desarrollar en el corto, mediano y largo plazo. Estas iniciativas tienen como objetivo seguir fortaleciendo la integración y participación de mujeres en las ciencias, así como acciones para establecer las bases y dar a conocer su trabajo. En este sentido, Stange indica que “deberíamos y podríamos hacer talleres, mentorías, seguir reuniéndonos, porque nos hace bien compartir nuestras experiencias y además recoger consejos entre nosotras mismas”.
Por su parte, Beatriz Barra anuncia que se comenzará a trabajar en “la creación de una estructura orgánica interna conformada por una comisión organizadora y por comités temáticos”, junto con acciones encaminadas a “la combinación de políticas de reconocimiento y a generar una discusión más integral de la misma ciencia y la innovación pensado en el contexto actual de crisis ecológica y cambio climático”.
Para el 2024, la agenda de género de RIAC consistirá en “continuar con actividades formativas y de visibilización, profundizar las radiografías cuantitativas y cualitativas, construir una sección de género en la biblioteca de la Facultad, crear instancias de intercambio en investigación e innovación de las académicas de la Red y problematizar la violencia en entornos científicos”, explica Barra.
Las numerosas iniciativas y propuestas que tiene RIAC para el futuro son el reflejo de un problema que debe ser atendido, para el cual, “se necesita un cambio cultural, que se hagan estrategias concretas, como las contrataciones específicas de académicas, dar más apoyo y facilidad en los proyectos”, concluye Stange.