El 2024 es un año clave para Pablo Neruda y su legado. Lo es también para la Universidad de Chile, institución que custodia su biblioteca personal donada por el mismo Premio Nobel, ya que en junio de este año se cumplieron 100 años de la publicación del libro 20 poemas de amor y una canción desesperada, y 70 años de la ya referida donación al plantel. A estas fechas se suma, además, la conmemoración de los 120 años del natalicio de Neftalí Reyes, este 12 de julio.
Para relevar este hito de la memoria literaria del país, la Fundación Pablo Neruda y la Universidad de Chile convocaron a diversos sectores del mundo cultural y autoridades de gobierno a la Casa Museo en Isla Negra, ocasión en la que se homenajeó al Nobel con un acto cargado de música y poesía, y con una ofrenda de flores en su tumba, ubicada en este mismo espacio museal.
La delegación de la U. de Chile -que posee un convenio de colaboración con la Fundación- estuvo encabezada por la vicerrectora de Extensión y Comunicaciones, Pilar Barba, para quien este 12 de julio “es un día especial en un año tan especial”. En su discurso, relevó “la profunda afinidad entre el poeta y la Universidad de Chile”, la cual “se evidenció en un notable discurso que se dio cuando hizo entrega de su archivo a la Universidad, “a la que consideraba ‘la estrella de nuestra bandera’”. El significado de este gesto “se evidencia en uno de los últimos párrafos: ‘el esplendor de esos libros, la gloria oceánica de estas caracolas, cuanto conseguí a lo largo de mi vida, a pesar de la pobreza y en el ejercicio constante del trabajo, lo entrego a la Universidad, es decir, lo doy a todos’”.
También estuvo presente la ministra (S) de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Noela Salas, quien en su mensaje celebró los 120 años de “una figura fundamental de la historia cultural y política de nuestro país”; año en que también el Ministerio “ha definido como el año de lectura para las infancias y las adolescencias”. A partir de esta coincidencia, se propone “fomentar la lectura en este país (...) Una tarea ardua para que la lectura sea parte de la vida de las personas”. En definitiva, señaló, que el patrimonio y las artes “sea parte de la canasta básica cultural de las personas”.
La académica de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la U. de Chile y presidenta del directorio de la Fundación Neruda, Kemy Oyarzún, dejó un mensaje de saludo en el que destacó la reunión en Isla Negra como una oportunidad para “volver a escucharlo con dos grandes encargos: conmemorar su natalicio y los 100 años de los 20 poemas de amor”, relevando de este último sus tópicos -el amor, el cuerpo- y niveles de lectoría a nivel global e intergeneracional. El segundo encargo, agregó, es poner en valor y conocer en su “obra posterior la presencia de la materia”, destacando específicamente “grandeza ecopoética de su canto”, encontrable en “el amor de la materia”, pues “nunca dejó de hablar de las energías, de las estrellas y de ahí al erotismo geofísico solo un paso”. Finalmente, indicó, el mejor homenaje que se puede hacer a Neruda es “poner la cultura y los imaginarios críticos (...) con nuestros pueblos todos”.
Fueron parte de la instancia también Alejandra Araya y Eduardo Vera, académicos de la Universidad de Chile e integrantes de la Fundación. En este espacio cultural del conocido como “litoral de los poetas”, además, se presentó una exposición con la obra visual de la artista Paloma Valdivia, ilustraciones sobre El libro de las preguntas, trabajo colaborativo con el MINCAP que recorrerá las 16 regiones del país. Como agregó la ministra, “esta muestra será parte del Plan del Libro y la Lectura en las regiones”.
Delegación de estudiantes internacionales
Parte de la comitiva de la U. de Chile estuvo integrada por 14 estudiantes de la Universidad de São Paulo, quienes se encuentran en el país becados por un programa de internacionalización con inclusión de dicho plantel público. Gestionado por la Vicerrectoría de Inclusión y Desenvolvimiento de su universidad de origen y la Dirección de Relaciones Internacionales de la Casa de Bello, la delegación está de visita en nuestro plantel para realizar una serie de actividades académicas y extracurriculares, acompañadas por un proceso formativo y de autorreflexión apoyado también por la Oficina de Relaciones Internacionales de la Facultad de Filosofía y Humanidades.
Esta comitiva llegó hasta Isla Negra, acompañados por la académica del Departamento de Literatura, Alejandra Bottinelli, quien señaló que la poesía de Pablo Neruda “es, en muchos casos, la aproximación más ‘real’ que jóvenes de otras latitudes tienen a nuestro país y a nuestra cultura. Así les ha ocurrido a muchxs de lxs estudiantes brasileños de la Universidad de São Paulo que nos están visitando en esta ocasión”.
Ellas y ellos, detalló la académica, “nos han contado que conocieron de nuestro país primeramente por la poesía de Neruda y de Mistral, y es muy interesante cómo sus percepciones y afectos sobre y hacia nuestro país están transidos, por ejemplo, por el ‘ensurecimiento’ que despliega una parte de la geopoética nerudiana, así como su percepción de un Chile comprometido con la justicia social, y donde la apreciación poética de nuestra cotidianidad se funde en una mirada que integra imágenes de lo popular y lo vernáculo, vitalizadas en una proyección metafísica”. Eso, finalizó la experta, “es una fuerza que podríamos llamar nerudiana y a la vez chilena, esta fusión entre poesía y percepción, que es una de las mayores potencias de la literatura y las artes. Por eso estamos aquí con ellas y ellos, para aportar a enriquecer esas percepciones e imágenes con la experiencia directa sobre los entornos de esa poesía y sus poetas”.
Pablo Neruda y la U. de Chile
Junto con ser estudiante del plantel en la carrera de Pedagogía en Francés, Pablo Neruda sostuvo un importante vínculo con la Universidad de Chile, cristalizado con la donación de su biblioteca personal el año 1954, suceso del que se cumplieron 70 años el pasado 20 de junio. Parte de esa donación -que contempla 5.107 libros, 8.400 caracolas, 155 discos y 263 revistas de su colección personal- fue declarada Monumento Histórico Nacional el 2009.
Actualmente, el equipo del Archivo Central Andrés Bello de la Vicerrectoría de Extensión y Comunicaciones está a cargo de la conservación y difusión de este legado, el que se encuentra disponible para consultas de investigación. Junto a ello, el plantel se encuentra en un proceso de digitalización de la colección Neruda de Banco Estado, integrada por libros sobre el poeta y diplomático y ediciones especiales en distintos idiomas, atesorados por Hernán Bravo Moreno, estudioso de la obra nerudiana. Este material, al igual que el de la biblioteca personal, se encuentra en parte disponible en la Biblioteca Digital.
Una de las acciones más recientes asociadas a la vinculación de Neruda con su alma mater fue la suscripción de un convenio de colaboración con el plantel, que data del año 2022. A ello se suma la recepción de una serie de registros del documentalista y profesor alemán Ebbo Demant, quien realizó una película sobre el poeta. Estos registros están bajo resguardo de la Cineteca de la Universidad de Chile.