Ácidos grasos omega-3, nutrientes esenciales para la salud cardiovascular y neurológica

Seminario multidisciplinar analiza los ácidos grasos omega-3

Los ácidos grasos poliinsaturados (AGPI) son un tipo de grasas saludables esenciales para el funcionamiento de nuestro organismo. Cumplen un papel clave en la salud cardiovascular, neurológica, en la modulación de procesos inflamatorios y en otros procesos biológicos importantes, pero el organismo humano no puede sintetizarlos (o lo hace en muy pequeña proporción en algunos casos), por lo que deben obtenerse a través de la alimentación o suplementos.

En particular, los ácidos grasos omega-3 son AGPI precursores de mediadores con actividad antiinflamatoria y son muy importantes para la salud cardiovascular, el desarrollo neurológico y visual en la infancia, y la prevención de enfermedades como depresión y patologías neurodegenerativas en la adultez. En la tercera edad, estos compuestos pueden contribuir a mejorar la calidad de vida en personas con enfermedades neurodegenerativas o antecedentes de eventos cardiovasculares, complementándose con los tratamientos médicos necesarios. Tomando en cuenta la alta prevalencia actual de enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas en Chile y en el mundo, conocer cuáles son los efectos beneficiosos de los ácidos grasos omega-3, en qué alimentos encontrarlos, y entender cómo la producción de lípidos funcionales puede contribuir a aumentar la bioaccesibilidad y biodisponibilidad de estos nutrientes, es de gran interés tanto para la academia como para la industria. 

Para difundir el conocimiento acerca de los ácidos grasos omega-3, los profesores Miguel Ángel Rincón y Rodrigo Valenzuela, académicos del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA) y de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile respectivamente, organizaron este 7 de noviembre el Seminario Internacional “Ácidos Grasos Poliinsaturados Omega-3: Desafíos Alimentarios, Nutricionales y Clínicos”, en la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile. Este evento reunirá a especialistas nacionales y extranjeros de diversas áreas para debatir sobre sus beneficios de salud, fuentes alimentarias, y tecnologías innovadoras para su incorporación en la dieta diaria.

Según Miguel Ángel Rincón, Doctor en Química Avanzada y coordinador del Laboratorio de Lípidos del INTA de la Universidad de Chile, “el consumo de omega-3 es vital en todas las etapas de la vida, tanto para el desarrollo cognitivo en la primera infancia como para prevenir enfermedades crónicas y mejorar la calidad de vida en la vejez”.

Dónde encontrarlos

Los ácidos grasos omega-3 deben obtenerse a través de la alimentación o suplementos, siendo los pescados, mariscos, ciertas especies de microalgas y algunos aceites vegetales como los de chía, linaza y nuez sus fuentes más importantes. También se encuentran en frutos secos, especialmente en nueces, aunque en menor proporción. Sin embargo, el consumo de ácidos grasos omega-3 es generalmente bajo, lo cual puede comprometer el equilibrio con los ácidos grasos omega-6, que son precursores de mediadores proinflamatorios. “Mantener un balance de ingesta adecuado entre ambos es clave, ya que un exceso de omega-6 en detrimento de los omega-3 puede favorecer la aparición de procesos inflamatorios en el organismo”, advirtió el profesor Rincón.

La importancia de encontrar fuentes alternativas de ácidos grasos omega-3 radica en los problemas de sobreexplotación de los recursos pesqueros y el elevado precio de los alimentos de origen marino. En el seminario “Ácidos Grasos Poliinsaturados Omega-3: Desafíos Alimentarios, Nutricionales y Clínicos” también se explorarán métodos de innovación tecnológica, como el desarrollo de lípidos de diseño enriquecidos con omega-3. Estos lípidos están formulados para maximizar la absorción sin aportar calorías adicionales, lo que los convierte en una opción funcional y eficiente para optimizar el su consumo.

Según el profesor Rincón, “esos son lípidos que se diseñan, porque no suelen existir en la naturaleza o lo hacen en muy pequeña proporción, y los incorporamos como ingredientes funcionales en otros alimentos para favorecer la asimilación sin que supongan un aporte calórico excesivo. Eso se puede hacer por procedimientos químicos de síntesis o por procedimientos enzimáticos. Hoy día se prefiere utilizar enzimas, porque son procedimientos más limpios y seguros, y más medioambientalmente sostenibles que los procedimientos químicos”.

Este seminario busca sensibilizar y capacitar a profesionales de distintas áreas, incluyendo nutricionistas, ingenieros/as en alimentos, químicos/as, bioquímicos/as, tecnólogos/as y profesionales médicos, entre otros, en los múltiples roles de los ácidos grasos omega-3 en la salud pública, y cómo promover su consumo efectivo en la población.