Investigadoras de U. Politécnica de Madrid expusieron en Antumapu

Investigadoras de U. Politécnica de Madrid expusieron en Antumapu
Belén Diezma trabaja en el grupo de investigación del Laboratorio de Propiedades Físicas y Técnicas Avanzadas en Agroalimentación (LPF-TAG) de la Universidad Politécnica de Madrid.
Belén Diezma trabaja en el grupo de investigación del Laboratorio de Propiedades Físicas y Técnicas Avanzadas en Agroalimentación (LPF-TAG) de la Universidad Politécnica de Madrid.
Lourdes Lleó, durante su exposición en el encuentro realizado en las instalaciones del CEPOC
Lourdes Lleó, durante su exposición en el encuentro realizado en las instalaciones del CEPOC
A la charla asistieron estudiantes, académicos, investigadores, y profesionales del rubro.
A la charla asistieron estudiantes, académicos, investigadores, y profesionales del rubro.

A la charla, que fue inaugurada por el Director del CEPOC, Prof. Víctor Escalona, asistieron estudiantes, académicos, investigadores, y profesionales del rubro.

Belén Diezma y Lourdes Lleó, trabajan en el grupo de investigación del Laboratorio de Propiedades Físicas y Técnicas Avanzadas en Agroalimentación (LPF-TAG) de la Universidad Politécnica de Madrid. Equipo que tiene varias líneas de investigación, una de ellas es la que se centra en tecnologías de postcosecha y es ésta la que les une con el CEPOC.

Con el Centro de Estudios de Postcosecha (CEPOC) de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, el mencionado laboratorio tiene un proyecto de colaboración llamado "DURASFRUT", que es financiado por la Universidad Politécnica de Madrid, para tener colaboraciones con grupos de investigación de universidades de Latinoamérica.

"Lo que estamos trabajando con el CEPOC, son productos de IV Gama. Nosotros teníamos interés en la aplicación de algunos de los sensores y tecnologías que nosotros desarrollamos aplicados en IV Gama, de la mano de un grupo de investigación que tuviese experiencia en estos productos", señaló Belén Diezma.

El proyecto se centra en la aplicación de imagen hiperespectral para la evolución de la vida útil de los productos de IV Gama; y la aplicación de sensores de gases para supervisar la evolución del cambio de las atmósferas en el interior de las bolsas de los embases de IV Gama, tratando de tener una tecnología que, de forma objetiva, evalúe cuán bueno es un procedimiento para extender la vida útil de un producto.

"Nosotros no aplicamos ozono, no aplicamos ultravioleta, nosotros no sabemos cuáles son las mejores atmósferas para los diferentes productos, eso lo sabe el CEPOC. Pero, nosotros podemos decir con nuestra cámara que este producto ha tenido una vida útil más larga que el otro producto que tenía otro procedimiento. O prever en un momento, que todavía no es visible, cuál será la vida útil de determinado producto", añade la investigadora.

La Dra. Diezma señala que la imagen hiperespectral es una cámara, un tanto especial. Las cámaras fotográficas comunes tienen tres canales, de manera que son capaces de reproducir la realidad tal cual nosotros la vemos. Las cámaras hiperespectrales, en tanto: "son sensores que miden todo el espectro de la luz, de tal manera que pueden tener más de cien canales. Cada uno para una longitud de onda diferente de ese espectro, que no solamente puede estar centrado en el visible, si no que puede irse al infrarrojo, y en el infrarrojo, la variación de ese espectro depende de diferentes elementos y compuestos que están presentes en el producto. Todas esas longitudes de onda me dan información de color y me da información puntual de diferentes bandas, bandas en las que podemos estar absorbiendo pigmentos muy importantes como la clorofila, como los carotenos, etc. Entonces, ver cómo se modifica el espectro en esas regiones es muy importante".

Una vez que concluya el proyecto, ambos grupos de investigación evaluarán la forma extender esta colaboración. Para continuar con los estudios, el nuevo financiamiento será buscado en convocatorias que estén abiertas en Chile y en las que puedan aplicar.

Estudiantes comprometidos

Este es el segundo viaje que la investigadora Belén Diezma, realiza a Chile, por lo que ya conocía las instalaciones del CEPOC.

"La primera vez que vine me fui francamente muy impresionada. Sabía que el CEPOC había modernizado sus instalaciones hace poco tiempo, pero pese a ese poco tiempo, todos sus equipos y cámaras estaban funcionando perfectamente, así como también los cromatógrafos y el resto del equipo. En este segundo viaje, en tanto, he podido corroborar mi impresión anterior y ver que la producción está siendo francamente buena", señaló Diezma.

La investigadora alabó, además, la calidad del capital humano que forma parte estable del CEPOC, así como de los alumnos tesistas que colaboran con este Centro.

"Siendo nosotros un grupo mucho más grande que el CEPOC, tenemos un flujo de alumnos mucho más pequeño. En el CEPOC tienen un volumen de alumnos impresionante que, además, está muy bien organizado, ya que se ve que los estudiantes que ya trabajan en el Centro, pasan a enseñarle a los que llegan de una forma piramidal, este aspecto me impresionó muchísimo", puntualizó la Dra. Diezma.