El vuelo, efectuado el miércoles 7 de marzo, se realizó en un Airbus de la familia A320 y recorrió la distancia entre Santiago y Concepción. Asistieron la ministra de Medio Ambiente, María Ignacia Benítez; el presidente del Senado, Guido Girardi; el subsecretario de Energía, Sergio del Campo FAMET; el Gerente general de LAN, Ignacio Cueto, el Gerente general de Copec, Lorenzo Gazmuri; empresarios, dirigentes locales, científicos y periodistas.
"Se utilizó un 31% de biocombustibles, y se redujeron en un 25% las emisiones de CO2. El combustible tradicional para la aviación procede del petróleo y al utilizarlo se libera CO2. Con los biocombustible el balance es neutro, el CO2 que se libera, ha sido previamente capturado por un cultivo vegetal durante su crecimiento, por lo que no hay emisión adicional de CO2 a la atmósfera", señala el Prof. Manuel Paneque.
Buscando generar una operación cada vez más sostenible, Lan Airlines y Copec realizaron este primer vuelo comercial con biocombustibles de segunda generación en Sudamérica.
"Existe un interés por parte de estas compañías de promover el uso de biocombustibles de segunda generación que se obtienen a partir de cultivos que no compiten con la producción de alimentos como la jatropha y/o residuos orgánicos como los aceites vegetales, que pueden ser procesados, quemarse directamente o ser convertidos por procesos químicos en combustibles de alta calidad", añade el investigador.
Precisamente el combustible utilizado provino de residuos de aceite vegetal refinado y cumplía con los más estrictos estándares técnicos requeridos para volar.
"El vuelo marca un paso muy importante hacia el futuro y el desarrollo de los biocombustibles con modelos y estrategias sostenibles para la aviación comercial y con alto potencial de expansión en Chile y Sudamérica", puntualiza Paneque.
El investigador añadió que los biocombustibles aportan nuevas soluciones energéticas y pueden promover el desarrollo agrícola y social de territorios vulnerables y agroecosistemas degradados.
"La industria de la aviación, tiene un compromiso en la reducción de la emisión de gases de efecto invernadero en sus operaciones. Según los acuerdos internacionales, el objetivo de la industria es disminuir en 50% estas emisiones para el año 2050", agrega el Prof. Paneque.