En esta original iniciativa, el profesor Nicolás Magner P., convirtió al curso en un verdadero mercado virtual, en el que los alumnos debieron intervenir como productores y distribuidores comprando y vendiendo insumos y producción de un año calendario.
"En esta oportunidad, durante un mes, se simuló un mercado compuesto por 9 productores de maíz, trigo, lechuga y poroto, y 7 distribuidores de factores productivos tales como suelo, insumos, mano de obra y maquinaria, más un mayorista personificado por Manuel Araya, y un Banco ejecutado por mi persona", señala el académico.
Para logarlo, el académico contó con el apoyo del Web master de la Facultad, Manuel Araya A., quien cerraba los negocios de manera presencial con la firma de una factura por cada transacción.
"Si bien las cotizaciones de insumos, mano de obra, arriendo de maquinaria y tierras fueron recibidas vía e-mail, procuré que las negociaciones finales con los distribuidores fueran "cara a cara",con el objeto de poner a prueba la capacidad "negociadora" de los "empresarios mayoristas", lo que permitió que los grupos se empoderaran de sus personajes", añade Araya.
El objetivo de cada equipo fue, durante el mes, y luego de construir modelos de optimización, pronosticar precios, y negociar contratos de compra y arriendo de factores productivos, maximizar su rentabilidad económica.
"Los objetivos de aprendizaje se centraron en que, a través de una simulación, los alumnos comprendieran las generalidades del negocio agrícola, enfocándose principalmente en competencias vinculadas a la planificación y negociación", puntualiza Magner.
Aprendizaje realista
El viernes 11 de mayo pasado el juego de roles llegó a su fin, y los alumnos debieron dar cuenta de su gestión en una clase abierta a la que asistieron académicos y la Directora de Escuela de Pregrado de la Facultad, Prof. Verónica Díaz M.
"Nuestro rol en el juego fue como proveedor de insumos agrícolas y para fijar precios nos concentramos en qué insumos iban a pedir los productores y en qué cantidad. En definitiva nos arriesgamos. Por ejemplo compramos demasiado maíz y nos quedó un resto en bodega, pero hasta el último día tratamos de comercializarlo", señala la alumna Divi Bravo.
Cada grupo debió realizar una breve exposición de su gestión y conocer, finalmente, cual fue su ubicación en el ranking de empresas de este mercado virtual.
"Como productores nosotros diseñamos un modelo de optimización en el que consideramos los precios y los subestimamos, por lo tanto el modelo está considerando una rentabilidad más baja a la real y además, trabajamos reduciendo los costos de producción al máximo posible", añade el estudiante de Ing. Agronómica Oscar Santibáñez.