Reacreditan por 6 años Programa Doctorado en Acuicultura

Reacreditan por 6 años Programa Doctorado en Acuicultura
El Prof. Nelson Díaz, Secretario del Comité académico del Programa.
El Prof. Nelson Díaz, Secretario del Comité académico del Programa.
En la Universidad de Chile y específicamente en la Facultad de Cs. Agronómicas, existe una tradición en la enseñanza de la Acuicultura.
En la Universidad de Chile y específicamente en la Facultad de Cs. Agronómicas, existe una tradición en la enseñanza de la Acuicultura.

El Programa Doctorado en Acuicultura, que es desarrollado por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, la Universidad Católica del Norte y la Universidad de Chile, tiene como objetivo formar doctores que tengan una sólida formación científica en áreas de ciencias biológicas y sean capaces de, integrarse a la industria aplicando sus competencias y capacidades a la resolución de problemas, a generar innovación tecnológica y mejorar los sistemas de producción, y a la diversificación de la Acuicultura.

En la Universidad de Chile y específicamente en la Facultad de Cs. Agronómicas, existe una tradición en la enseñanza de la Acuicultura, ya que esta fue la primera universidad que generó un magíster a finales de 1997, y en conjunto con Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y la Universidad Católica del Norte, fueron las primeras que generaron un doctorado; ya que la Acuicultura siempre ha sido un área prioritaria.

“Este fue el primer programa de Doctorado en Acuicultura que hubo en el país, que ya está consolidado, y que ha generado una cantidad importante de graduados, lo cual debería irse incrementando en la medida en que estos graduados se insertan en las instituciones y empresas productoras”, señala el Prof. Nelson Díaz, Secretario del Comité académico del Programa.

El programa tiene una estructura de tres cursos obligatorios que buscan establecer un lenguaje común entre alumnos que vienen de carreras distintas, que se revisan anualmente, pero que son más estables; y también tiene cursos electivos que van cambiando anualmente y que responden a lo que está pasando en la industria, Es en dichos cursos donde se van revisando los nuevos requerimientos y las nuevas orientaciones.

“El Programa, además, se acomoda a las necesidades del medio en virtud de las tesis que los estudiantes realizan, que van dando cuenta de las necesidades de desarrollo del medio”, añade el Prof. Díaz.

Razones de un éxito creciente

La calidad de sus académicos, la adecuación a las condiciones del medio y la variedad de alumnos que atrae son, sin duda, las razones que han convertido a este postgrado en el más importante del país en el área.

“Hay una consolidación en la demanda, porque desde el 2005 a la fecha ha ido creciendo en interés de la gente por ingresar. Hoy tenemos cerca de 35 estudiantes, que ya es un número relativamente estable y lo más importante es la cantidad de graduados que ya llegan a 20. Cabe destacar que todos tienen trabajos en el área de acuicultura en universidades, instituciones públicas, empresas privadas y centros de investigación. De esos graduados hay un número importante de extranjeros que han regresado a sus países en Latinoamérica, todos trabajando en empresas e instituciones ligadas a la acuicultura”, puntualiza el Prof. Díaz.

Cabe señalar que los alumnos provienen de una diversidad de carreras como: Ingeniería en Acuicultura, Biología Marina, Ingeniería Pesquera; y también se incluye la Medicina Veterinaria, la Ingeniería Agronómica y otras más.

El Programa cuenta con un cuerpo académico consolidado que tiene una buena productividad científica. En la actualidad, este cuerpo académico lo constituyen cerca de 40 personas: el Claustro, que son aquellos profesores habilitados para dirigir una tesis de postgrado, que en este momento lo constituyen 28 profesionales de las 3 universidades; y además, se cuenta con 12 profesores colaboradores, también de las tres universidades.

“Siempre hemos considerado que las empresas acuícolas chilenas, principalmente la de salmones, compiten a nivel mundial con países productores que tienen en su desarrollo un aporte de la ciencia y la tecnología; y las empresas chilenas de salmones, deberían incorporar, cada vez más, personal de alta calificación para el desarrollo de ciencia y tecnología en la propia empresa, para mejorar su nivel de competitividad”, puntualiza el Prof. Díaz, Secretario del Comité académico del Programa.

Por otro lado, añade que la Acuicultura chilena, y no solo hablando de las empresas de salmones, sino que de otras especies también, incluyendo los moluscos, crustáceos y algas; necesita también una diversificación, para lo cual existen ya programas nacionales para la diversificación de la Acuicultura, lo cual también requiere personal calificado para realizar investigación y desarrollo tecnológico.