El miércoles 15 de mayo, autoridades del campus Juan Gómez Millas se reunieron con el equipo de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos con el fin de revisar el formulario con el que se encuentran preparando la muestra intencionada de programas formativos que se desarrollará durante 2025 en el contexto de la acreditación institucional.
El vicerrector, Claudio Pastenes, explicó los focos a los que atiende la muestra intencionada y señaló que la invitación es a evaluar de qué manera las normativas, políticas y procedimientos de la Universidad están bajando hacia ellos (diseño y actualización curricular: perfil de egreso y plan de estudio; procesos y resultado de enseñanza y aprendizaje conducentes al logro del perfil de egreso; cuerpo académico o docente; y recursos operativos y económicos para la formación). El vicerrector recalcó que se trata de un trabajo interno de cada facultad y que su valor está en generar un análisis crítico, una reflexión previa a la muestra intencionada de programas formativos. Como facultades de la Universidad de Chile tenemos “la gran oportunidad de identificar cuáles son las dificultades en cada uno de estos cuatro focos y tenemos la oportunidad de que cada programa proponga sus propios pasos a seguir”. Si el programa de pre o postgrado resulta seleccionado para la muestra de 2025 tendrá camino avanzado, pero si no es así tendrá la ocasión de reflexionar con perspectiva de calidad integral para hacer mejoras en el futuro inmediato, indicó.
Sergio Villanueva, director de calidad de posgrado, destacó la visión panorámica de toda la universidad que se generará a propósito del proceso de acreditación que estamos viviendo y que ello necesariamente movilizará soluciones institucionales. “Casi todas las políticas son post acreditación pasada”, puso de ejemplo, por eso, los desafíos que las facultades encuentren en este periodo de autoevaluación podrán ser abordadas desde un punto de vista institucional. Puntualizó: “Esto no es una autoevaluación clásica de carrera; esto es transferencia de políticas, mecanismos institucionales, a los programas y equivalencia en el desarrollo de éstos”.
La decana de la Facultad de Ciencias Sociales, Teresa Matus, dijo que veía en este proceso la coyuntura de articular mejor el pre y el postgrado, promoviendo una trayectoria estudiantil distinta a la actual y la posibilidad de compartir, entre las distintas facultades del Campus Juan Gómez Millas, buenas prácticas, posibles soluciones a obstáculos comunes y proyectos académicos. Por su parte el vicedecano de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Ulises Cárcamo, recalcó que el proceso de autoevaluación no es un trámite, sino que su importancia radica en la incidencia hacia el plan de desarrollo de las facultades y de la Universidad, esto “en la medida en que no solamente respondamos a los formularios, sino que generemos documentos de gran utilidad para las unidades académicas”.
Tras responder preguntas y reflexionar sobre el formulario de preparación a la muestra intencionada, Leonor Armanet, directora del departamento de Pregrado, indicó que la autoevaluación ayuda a potenciar, mejorar y compartir las fortalezas; y donde hay debilidades, buscar caminos para resolverlas: “en educación y en todo lo que hacemos en la universidad, las mejoras no son instantáneas, requieren de tiempo y de reflexiones también”, nuestra responsabilidad frente a un problema es buscar caminos para resolverlo.
Para saber más de la acreditación institucional por favor visitar este enlace.