El Concurso de Validación Tecnológica 2024 (CVTUCH 2024) de la Universidad de Chile está diseñado para apoyar proyectos que busquen validar tecnologías emergentes desarrolladas dentro de la casa de estudios superiores, facilitando su transición desde la investigación básica hacia etapas más avanzadas de desarrollo tecnológico y comercialización. Su objetivo es incrementar el nivel de madurez tecnológica (TRL) de los proyectos seleccionados, permitiendo así que se acerquen a aplicaciones preclínicas o comerciales.
Rosana Velasco, gestora tecnológica del Programa Ciencia 2030 de la Universidad de Chile, comentó sobre el concurso: “Como gestora tecnológica del Proyecto Ciencia 2030, me motiva ver que, de las 15 postulaciones recibidas, 6 provinieron de las facultades que forman parte de nuestro proyecto, y me alegra que 4 de ellas fueran de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas. De estas, finalmente 2 iniciativas, lideradas por los profesores David Vásquez y Matías Martínez, fueron seleccionadas para continuar con sus validaciones. Esto refleja la alta calidad y la dedicación de nuestros investigadores e investigadoras, alineándose con la visión de innovación que impulsamos desde el proyecto. Aseguro mi apoyo, y el del equipo de Ciencia 2030, para acompañar a los seleccionados, así como guiar al resto de los participantes en su camino hacia futuras validaciones y ayudarles a avanzar en sus procesos".
El Prof. David Vásquez Velásquez, adscrito al Departamento de Química Farmacológica y Toxicológica, presentó la investigación titulada "Estudio farmacocinético In Vivo e In Vitro de nuevas pirimidoisoquinolinquinonas activas contra bacterias gram positivas vancomicina resistentes". Este proyecto se enfoca en una de las áreas más críticas de la investigación farmacéutica moderna: el desarrollo de nuevas moléculas con actividad antibacteriana que puedan enfrentar la creciente amenaza de la resistencia a los antibióticos, particularmente en bacterias Gram positivas como aquellas resistentes a la vancomicina.
“El proyecto busca caracterizar de manera exhaustiva la distribución y excreción de la molécula más activa dentro de una nueva familia de pirimidoisoquinolinquinonas. Estas moléculas han mostrado una prometedora actividad antibacteriana frente a bacterias que son resistentes a tratamientos convencionales. El enfoque del proyecto es tanto in vivo como in vitro, utilizando modelos murinos para obtener datos precisos sobre cómo estas moléculas se distribuyen y eliminan en un organismo vivo”, explica el académico.
Este tipo de estudio es fundamental para entender el comportamiento farmacocinético de la molécula, lo que permitirá determinar su potencial eficacia y seguridad como tratamiento antibacteriano. La investigación no solo se centra en la comprensión de cómo estas moléculas interactúan dentro de un sistema biológico, sino también en cómo pueden ser optimizadas para avanzar a fases más avanzadas de desarrollo, que eventualmente podrían incluir ensayos preclínicos y clínicos.
“El proyecto tiene como objetivo final elevar el nivel de madurez tecnológica (TRL) de estas nuevas moléculas, moviéndolas desde una validación experimental en el laboratorio hacia una etapa de desarrollo más avanzada, lo que es vital para su posible aplicación en tratamientos clínicos en el futuro. Este enfoque integrado de desarrollo farmacológico es esencial para abordar el problema de la resistencia a los antibióticos, ofreciendo nuevas esperanzas para el tratamiento de infecciones que actualmente carecen de opciones terapéuticas efectivas”, complementa.
“Cada fase del proyecto, desde la caracterización inicial hasta la validación preclínica, demanda la participación de expertos en diversas disciplinas que se distancian un poco del enfoque original en el diseño de fármacos. Por ejemplo, la etapa actual de desarrollo, que se centra en la farmacocinética de las nuevas pirimidoisoquinolinquinonas, necesita el apoyo de profesionales con experiencia en experimentos con animales y análisis farmacocinético avanzado”, añade.
Para esta etapa, se ha incorporado al equipo el Prof. Mario Rivera Meza, adscrito al Departamento de Química Farmacológica y Toxicológica, quien es un experto en experimentación con modelos animales y cuenta con una vasta experiencia en el desarrollo y análisis de estudios farmacocinéticos. El profesor Rivera aportará su conocimiento especializado para asegurar que los estudios in vivo se realicen con la precisión y rigurosidad necesarias, proporcionando datos clave sobre la distribución, metabolismo y excreción de las moléculas estudiadas en modelos murinos.
En este sentido, el equipo está abierto a la colaboración con profesionales y estudiantes interesados en formar parte de este innovador proyecto, ofreciendo una oportunidad única de participar en una investigación de punta que tiene el potencial de generar un impacto significativo en la salud pública global. Los/as interesados/as pueden contactarse al correo electrónico dvasquez@ciq.uchile.cl
Nuevas pruebas genéticas
El proyecto del Prof. Matías Martínez Olguín, adscrito al Departamento de Ciencias y Tecnología Farmacéutica, se basa en una nueva metodología para hacer pruebas genéticas. Actualmente, se utiliza PCR para determinar los genotipos de los/as pacientes para luego optimizar su terapia farmacológica según su genética. El problema es que necesita infraestructura especial y personal altamente calificado para la ejecución e interpretación.
“Con nuestro proyecto, buscamos evitar todos los pasos de extracción y purificación de DNA y poder trabajar directamente desde una muestra de hisopado bucal y así poder acercar los beneficios de la farmacogenética a más gente. La idea será crear un dispositivo médico que realice las pruebas genéticas y las interprete como una recomendación clínica”, precisa.
“Este fondo permitirá validar el panel de variantes genéticas que utilizaremos, además de evaluar la estrategia de protección de propiedad intelectual, y así ir visualizando el camino para una posible transferencia tecnológica”, agrega.
Este proyecto está integrado por un equipo de investigadores jóvenes, entre ellos Leslie Cerpa y Carolina Gutiérrez, del área de Farmacia Clínica. “Necesitaremos apoyo de tesistas y memoristas y de hecho contamos con financiamiento para remunerar su trabajo, por lo que, si hay estudiantes con interés en la biología molecular y en los métodos de detección será una excelente área de desarrollo”, enfatiza. Los/as interesados/as pueden escribir al correo electrónico matias.martinez@ciq.uchile.cl