Bajo la consigna “Avances, desafíos y buenas prácticas: 10 Años del Programa de Acceso a la Educación Superior”, las delegaciones PACE provenientes de las regiones de Valparaíso, Metropolitana, O’Higgins y Maule se reunieron para analizar y proyectar el acompañamiento que realizan a las y los estudiantes de tercer y cuarto año medio, como también en los primeros años de tránsito universitario en el 3er Encuentro Macrozona Centro 2024.
Organizado por la Universidad de Chile, la Universidad Católica del Maule (UCM) y la Universidad de Santiago (USACh), el espacio comenzó con las palabras de la vicerrectora académica de la USACh, Leonora Mendoza Espínola, quien destacó lo que ha significado el programa para miles de estudiantes: “Estas cifras no solo demuestran la consolidación del PACE como política pública de alto impacto, sino que también dan testimonio de cómo ha cambiado la vida de jóvenes y de sus familias, ya que muchos de ellos han sido las primera generación con acceso a la educación superior, evidenciando con ello que un acompañamiento académico y socioeducativo certero se hace efectivo si es que se realiza desde la enseñanza media”.
Dichas cifras muestran que en diez años el Programa ha acompañado a más de 470 mil estudiantes, pasando de 69 establecimientos en 2014 a 638 en 2024. Establecido en 29 universidades a lo largo de Chile, cerca de 39 mil jóvenes han entrado a la universidad y 5 mil se han titulado.
Para profundizar y analizar estas cifras, así como la creación de esta política, se realizó un conversatorio con el mismo nombre del encuentro “Avances, desafíos y buenas prácticas: 10 Años del Programa de Acceso a la Educación Superior”, en el que participaron la ex ministra de Educación, Adriana del Piano, quien estuvo presente en los primeros años de implementación del PACE (2015 -2018); Rodrigo del Valle, director general de Inclusión y Acompañamiento de la Universidad Católica de Temuco; Jaumet Bachs, jefe de la División de Información y Acceso de la Subsecretaría de Educación Superior; y Beatriz Rahmer, encargada de Innovación Social y Pública de la Dirección de Innovación de la U. de Chile.
La ex ministra destacó que una de las causas principales del “éxito del PACE” fue que el “gobierno de Michelle Bachelet, tuvo como eje fundamental y central, durante los cuatro años, la educación”, focalizando los esfuerzos en reducir la inequidad existente en el sistema: “El foco estaba no sólo en la mejora de lo que ya estaba bien, sino que en cómo el país se hacía cargo de aquellos que por distintas razones no tenían las mismas oportunidades que otros. Había una impronta de emparejar la cancha en términos de oportunidades y sobre todo entendiendo que la educación es un mecanismo, y quizás en ese momento el gran mecanismo de las personas que estaban en una situación vulnerable o desmejorada para acceder a ´bienes´ culturales y formativos que les permitieran mirar su futuro de una manera distinta”.
Durante el resto de la primera jornada los equipos PACE de las catorce universidades compartieron y debatieron sobre sus trabajos y formas de acercarse tanto a las y los estudiantes como a los equipos docentes de los liceos por medio de la presentación de veintitrés ponencias y cinco workshops, buscando ampliar y compartir las experiencias y el conocimiento que han construido en estos años.
Segunda jornada
Desarrollada en la Casa Central de la Universidad de Chile, el día viernes estuvo marcado por el panel de conversación “Avances y desafíos de la institucionalización de la política pública PACE al interior de las Universidades”, en el que por Claudio Pastenes Villarreal, vicerrector de Asuntos Académicos Uchile; José Luis Llanos Ascencio, director de Pregrado USACh; y Yanina Tapia Castro, directora general de Docencia de Universidad Católica del Maule, dialogaron sobre la importancia de que programas como PACE adquieran un carácter legislativo, permanente y estable.
Claudio Pastenes, quien además encabezó la jornada, destacó la importancia de PACE al interior de la Uchile: “Este Programa para la Universidad de Chile es muy querido y muy apreciado. En primer lugar desde las comunidades estudiantiles de enseñanza media y el trabajo con la universidad, abriendo un espacio y oportunidad de equidad, y que sin él tendríamos muchos menos estudiantes, pero también es importante desde el punto de vista de la academia porque creo que cumple un rol relevante, ya que para nuestra institución tener un ambiente diverso es una prioridad”, invitando, además, a no sólo compartir las buenas prácticas sino que también el “dónde están las piedras y las rudezas de este camino”.
Entre los desafíos que se mencionaron, destaca la profundización del trabajo con los establecimientos educativos, la adecuación del sistema en su conjunto a los nuevos perfiles estudiantiles que ingresan a la educación superior, y la adaptación, aumento y aseguramiento del financiamiento de los programas en cada institución: “No puede ser que las universidades tengan que hacer malabares con otros fondos de otros proyectos para implementar el PACE”, señaló José Luis Llanos Ascencio, director de Pregrado U. de Santiago.
Posteriormente, se llevó a cabo la segunda tanda de ponencias (12) y workshop (4), en la que los y las participantes abordaron temas clave como el apoyo académico, la orientación vocacional y el acompañamiento socioemocional. Además, se presentaron buenas prácticas y se discutieron sobre los desafíos comunes que enfrentan los y las estudiantes de contextos vulnerables.
Ismael Jeria, coordinador de Enseñanza Media de PACE Uchile, se mostró muy satisfecho con ambas jornadas, ya que es una demostración de cómo se ha implementado el PACE a lo largo de estos años: “Es un trabajo realizado a pulso y construido con el apoyo entre los equipos de las distintas universidades que componen la Red Macrozona Centro, el que se hace aún más indispensable a diez años de su creación, y que esperamos se convierta pronto en una política pública que siga aportando a la construcción de un país más justo y con igualdad de oportunidades”.
La evaluación de Marco Iraola, coordinador ejecutivo PACE USACh, también fue positiva: "El encuentro cumplió el objetivo de compartir experiencias y aprender nuevas prácticas, pero por sobre todo se generaron espacios de reflexión en torno a los aprendizajes a 10 años de la implementación del PACE y los desafíos que tenemos para continuar desarrollando esta iniciativa, de manera que contribuya al proceso de transición de los y las estudiantes". "Quedó en evidencia la necesidad de la sistematización de datos para la toma de decisiones, ya sean de cobertura, como de estrategias para disminuir las brechas entre los perfiles de egreso de los y las estudiantes secundarios y los perfiles de ingreso a la Universidad. Aún existe la necesidad de la institucionalización de esta política de manera concreta en las Universidades, con el fin de trabajar articuladamente con todas las unidades internas", reflexionó.
Los paneles y conversaciones centrales de ambas jornadas fueron transmitidas vía streaming y pueden ser repasadas en los canales institucionales de PACE Uchile y PACE USACh.
El próximo Encuentro Macrozona 2025, como quedó definido en la jornada del viernes, será organizado por las universidades de Playa Ancha, Católica Silva Henríquez, Tecnológica Metropolitana y Católica de Valparaíso.