A lo largo de su trayectoria universitaria, Josefina Moreno ha encontrado en la ingeniería civil no solo una profesión, sino un medio para transformar realidades y retribuir a la comunidad que la ha formado. Su paso por la presidencia del Centro de Estudiantes se convirtió en una forma concreta de “devolver la mano” a la Escuela de Ingeniería de la Universidad de Chile, un espacio que, según destaca, le ha entregado oportunidades, redes y aprendizajes fundamentales.
Durante este periodo, Josefina también fortaleció su formación académica como ayudante y auxiliar en diversos cursos, incluyendo su labor en el Laboratorio de Hidráulica, donde consolidó conocimientos que hoy son parte esencial de su desarrollo profesional. Desde el área de Extensión reconoce y agradece especialmente la confianza de Karina Buch, quien impulsó su crecimiento como estudiante y líder.
Su vida, sin embargo, no se limita solo a la ingeniería. Josefina cultiva con disciplina su pasión por el atletismo, entrenando en el Club Deportivo de la Universidad Católica y compitiendo por la Universidad de Chile. Este equilibrio entre deporte, estudios y liderazgo estudiantil cuenta le permite mantener distintos círculos, ampliar miradas y no vivir únicamente dentro del mundo universitario.
En materia de proyectos, Josefina formó parte del programa AQUA365, dedicado a soluciones de agua para comunidades. Paralelamente, junto a Marcos Ríos, impulsa HydroTurb, una StartUp de innovación energética que busca aprovechar sobrepresiones en redes hidráulicas para generar electricidad. El equipo forma parte del programa OpenBeauchef 2025 y obtuvo el primer lugar en el Concurso de Innovación del Congreso de ingenieros de Chile.
Motivada por contribuir a una sociedad más justa y resiliente, Josefina visualiza un futuro en el que pueda crear una fundación orientada a enfrentar problemáticas hídricas y acercar la ingeniería a las personas. “Los conocimientos que adquirimos en la universidad son un privilegio y con ello la ingeniería civil debe estar al servicio de la comunidad”.
Este semestre cierra un ciclo importante: deja la presidencia y los roles de auxiliar, no sin antes agradecer a profesores, compañeros, amigos, familia y pareja por el apoyo constante que le ha permitido desarrollar todo su potencial. Con orgullo del camino recorrido y firmeza en sus valores, asegura que seguirá tomando cada oportunidad con disposición a aprender, crecer y servir.
“Estoy orgullosa de mi trabajo y esfuerzo, pero sobre todo de cómo me voy formando como mujer e ingeniera”, afirma. Y así, con la frente en alto, Josefina se prepara para los próximos desafíos que, sin duda, seguirá enfrentando desde el compromiso, la energía y el profundo sentido de comunidad que la caracterizan.