Trazados de hace 300 mil años reinterpretados:

"Tormenta solar", la expo sobre IA y el primer arte

"Tormenta solar", la expo sobre IA y el primer arte

Luego de ver un documental sobre el primer patrón abstracto de líneas cruzadas, el artista y profesor Arturo Cariceo del Departamento de Artes Visuales (DAV), se inspiró para realizar la exhibición digital Tormenta Solar que se encuentra disponible en Galería Mutte.

“Aprendimos de este primer arte de otra especie humana: los Neandertales, nuestros primos extintos. Si bien esto ya lo sabía por un libro, pero igual se me aceleró el pulso. El valor agregado del documental fue sumar otra especie: el Homo Naledi, trazando lo mismo hace 300 mil años. También, anota otro vestigio más antiguo, a medio millón de años de nosotros, atribuido al Homo Erectus. La sola idea de compartir con más especies los mismos símbolos geométricos y que los sapiens no seamos los primeros artistas de la humanidad, es para dejar de lado diferencias y tomarse unas copas en nombre de la cultura”, declara el profesor.

Formalmente son imágenes digitales realizadas con IA generativa. Conceptualmente, es una situación en la que se encuentra la obra del profesor Cariceo hace casi cinco años, cuando empezó a mirar y reconocer en la Inteligencia Artificial motivos para repasar de otra manera las ganas de hacer arte. Y es lo que se ve a lo largo de la exposición a través de una variada selección de obras geométricas.

“Si uno repasa lo de la IA generativa, mis imágenes chocan con la propensión de los artistas mediales a retener lo generativo como algo exclusivo de algo en vivo o tiempo real, porque mis imágenes tienen la diferencia distintiva de ser fijas aunque están producidas por algoritmos. En este sentido, la palabra generativa durante este siglo, gracias a las Apps, ha enriquecido su uso contextual, creando la complicidad inclusiva de entender normativamente piezas que no siendo interactivas no existirían sin el uso de la interacción. Siempre me pregunté qué pasaría cuando cualquier persona tuviera acceso a la IA y, obviamente, intuía que pasarían cosas muy diferentes a lo que los artistas mediales esperan. Me encanta que las herramientas tecnológicas faciliten mis necesidades artísticas, de lo que puedo hacer, de lo que me falta y reclamo, con herramientas para nada exclusivas. En cierto modo, tampoco le escapo al lado romántico porque creo que tengo paciencia para esperar que esas herramientas lleguen. Y vivo intensamente esa espera”, detalla el profesor.

Eje curatorial: el movimiento perpetuo del arte geométrico

El eje curatorial de Tormenta solar es su carácter de versión condensada de un movimiento perpetuo, que es el arte geométrico, leído desde las palabras de Vergara Grez definiendo la geometría como una energía “anterior a lo anterior”, que nos retrotrae a nuestra niñez ancestral. Consciente de que esta postura metafísica no era comprendida en el mundo del arte chileno, no dejaba al artista que esta apatía dejara aflojar los tensores de su cosmovisión.

“Poco antes de que su salud se deteriorara (Vergara Grez), estábamos trabajando en las que serían sus únicas obras digitales, quedando varias inacabadas por su muerte (2012), las que, tampoco, quise concluir porque no tenía sentido sin su presencia. Creo que hubiera disfrutado mucho crear con IA, porque estaba muy motivado trabajando conmigo en la computadora, y viendo los resultados curtidos en Tormenta solar, no dudo cuán lejos hubiera alargado la ruta y sus hábitos geométricos. Aquí vuelvo a mis primeras clases de composición que tuve con él, rememorando lo cómodo que me sentía tratando de resolver los problemas constructivos que me exigía”, cuenta el docente.

“Cuando la gente del futuro mire el arte de este siglo, verán que tuvo una intensidad distinta al siglo XX. Quizá lo que mejor resuma esta curatoría es un signo apenas perceptible, sobre el que vale la pena poner atención: la mirada cómplice con la democratización del arte”, detalla.

La motivación de esta muestra es tener la capacidad para asimilar emociones profundas, recuperar cierta inconsciencia geométrica. “Con la IA buscar aire es agradable, mucho neoludita no lo ve muy bien, les cuesta enganchar porque están aún en la sintonía del siglo pasado. Más de alguien hubiera utilizado lo que expongo para imprimir o pintar estas composiciones, y hubieran quedado espectaculares, pero serían espejismos del hacer real. Lo mío, es lo remoto y lo ubicuo, y tener noticias de cuestiones tan potentes como los trazos milenarios del Homo Nalendi, que literalmente están ultra remotos en el tiempo y tan ubicuos a través de las pantallas interconectadas, sirve de gran inspiración. Darte cuenta de esto, te potencia el día, la semana, el mes y el año, porque tus cosas creativas cambian muchísimo. Nuestros primos extintos te hacen olvidar la edad sapiens que tenemos, ya no sientes esa edad, sino la inherente al arte mismo que es anterior a cuando le llamamos así o cuando fue formateada en la acepción moderna. Y eso no se puede evitar”, resalta el artista.

Tormenta solar la puedes ver en la Galería digital Mutte aquí: https://drive.google.com/file/d/12HcjdI7T8gEQP-SpwfPT2VdOwzJExq02/view