A cargo de la artista orfebre Laura Pancerón:

Exposición: "Desperfecto Revelado" en la Sala Juan Egenau

Exposición: "Desperfecto Revelado" en la Sala Juan Egenau
"Yo tomo el concepto de adorno desde esta faceta del arreglo, trato de mostrar cómo la joya ya no es sólo un accesorio que se porta en el cuerpo para embellecer", afirma la artista Laura Pancerón.
"Yo tomo el concepto de adorno desde esta faceta del arreglo, trato de mostrar cómo la joya ya no es sólo un accesorio que se porta en el cuerpo para embellecer", afirma la artista Laura Pancerón.
La muestra a la que le da vida la artista orfebre de la Facultad de Artes, estará abierta al público hasta el 29 de junio en la Sala de Exposiciones Juan Egenau del Departamento de Artes Visuales.
La muestra a la que le da vida la artista orfebre de la Facultad de Artes, estará abierta al público hasta el 29 de junio en la Sala de Exposiciones Juan Egenau del Departamento de Artes Visuales.
Del catálogo, escrito por Sergio Rojas, se desprende: "Ya no se trataría de la producción de un suplemento para el cuerpo humano , sino del desborde del cuerpo hacia un cuerpo post-humano",
Del catálogo, escrito por Sergio Rojas, se desprende: "Ya no se trataría de la producción de un suplemento para el cuerpo humano , sino del desborde del cuerpo hacia un cuerpo post-humano",
El trabajo de Laura Pancerón es parte de una larga investigación y con la que la artista se  se tituló de artista orfebre.
El trabajo de Laura Pancerón es parte de una larga investigación y con la que la artista se se tituló de artista orfebre.

Entrar a la Sala de Exposiciones Juan Egenau es como entrar a un lugar donde plácidamente descansan los rostros de seres vivos, a los que no se les puede molestar. Sus facciones son expresivas, denotan un estado de reposo y calma y su cerebro es una compleja red de materiales, los que se asoman como si hubiesen sido sometidos a una ardua cirugía.

La complejidad de estos rostros dialoga con una instalación de tres cajas que destellan una luz y que en su interior guardan textos proféticos escritos en griego antiguo, los que se suman al misterio de estos rostros futuristas.

"Desperfecto Revelado" parece ser la revelación de misterios y de imperfecciones. Esta muestra es la sutil entrega de mensajes ocultos por parte de su autora, la que parece no tenerle miedo a lo desconocido y también el control de estos rostros que amenazan con despertar, revelando quizás algún otro desperfecto.

Del texto del catálogo de la muestra, escrito por Sergio Rojas, teórico del arte, se desprende: "La artista Laura Pancerón ensaya en este proyecto el inicio de un trabajo de desplazamiento, fruto de una larga investigación estética en el campo de la orfebrería que la ha conducido a proponer un itinerario histórico para la joya, considerando su relación con el cuerpo humano: como valor cultural de reconocimiento, como valor social de lujo, como prótesis para funciones preestablecidas y, finalmente, como condición del hiper-cuerpo hacia posibilidades inéditas".

Rojas agrega en el texto: "En la exploración estética de este último concepto se inscribe este trabajo, en que ya no se trataría de la producción de un suplemento para el cuerpo humano (prótesis) para su reconstrucción, sino del desborde del cuerpo, hacia un cuerpo post-humano. La artista nos propone, pues, examinar el presente del arte de orfebrería en el contexto de lo que podríamos considerar como el proceso de progresiva secularización de occidente."

¿Cuántas máscaras tiene Laura Pancerón?

Yo creo que muchas. La idea de la construcción de una duplicación apunta a la capacidad que tiene el artista de autocrearse y de autogenerarse, y que tiene mucho que ver con la idea del hipercuerpo que hoy estamos viendo en el arte contemporáneo, en donde se busca trascender lo natural y construir a partir de la ciencias, la tecnología y de distintos recursos, no sólo una nueva imagen, sino que también una nueva identidad, y poder jugar no sólo con la identidad que portamos, sino que con la posibilidad de asumir distintas identidades según las necesidades. Eso me interesó al plantear esta serie de diez máscaras.

Sergio Rojas habla en el catálogo del desplazamiento y de la estética del post, ¿cómo se reflejan esos conceptos en tu obra?

Hay varios puntos en los que se produce un desplazamiento. En primer lugar, el presentar un cuerpo tecnologizado y metalizado se relaciona con la idea del hipercuerpo, que habla de un cuerpo perfeccionado y arreglado, pero tras eso está la mirada de la joya. Yo tomo el concepto de adorno desde esta faceta del arreglo, trato de mostrar cómo la joya ya no es sólo un accesorio que se porta en el cuerpo para embellecer, sino que produce, de maneras más trascendental e internándose en la carne, un arreglo que trasciende el embellecimiento y que nos permite transformarnos, ser una nueva persona o generar una nueva identidad. La joya se desplaza, pasando de lo accesorio a lo esencial; es cuerpo, no es joya ni prótesis, evolucionando hacia una realidad de injerto, en el cual podemos reconocer que hay un elemento artificial, pero que está mimetizado e integrado con la carne, que en general es algo que pensamos es intocable y que no se puede intervenir.

¿Cómo propones la instalación que guarda textos en griego antiguo en comparación con las máscaras?

Sergio Rojas se refería en el texto que escribió para el catálogo a que esta presentación no es una señal apocalíptica, sino que es una señal de lo post. Las cajas iluminadas incorporan un texto que es una profecía que hace alusión a un tiempo final. No habla de una temporalidad sino que de una condición humana en una temporalidad final. Ese griego está conectado con ese tiempo de origen de donde sale esta palabra profética y que anuncia ciertas características que el hombre va a tener en la época en la que estamos viviendo hoy, en la que muchos autores, como Francis Fukuyama, aluden al fin de la historia, entre otras problemáticas que estamos viviendo. Ese texto se conecta con este paso de la condición de la humanidad y la duplicación y transformación del ser humano a partir de sus propias competencias y de sus propios recursos.

El trabajo que presenta la artista visual Laura Pancerón en la muestra "Desperfecto Revelado", es parte de una larga investigación de cuatro años, aproximadamente, del cual derivó en un proyecto de creación y en su tesis final con la que la artista se tituló de artista orfebre.

La artista concluye: "Este trabajo es el resultado de una inquietud personal, como artista, de poder investigar en torno a la orfebrería, donde hago una mirada histórica de la joya como objeto de reconocimiento en el pasado, la secularización de la historia y cómo la joya pierde esta trascendencia y esta conexión con lo espiritual y qué lugar podría tener hoy la joya en el mundo contemporáneo".