Desde septiembre de este año, la Unidad de Apoyo y Coordinación del Consejo de Evaluación de la Universidad de Chile tiene dos nuevos miembros. Se trata de Ronald Rubilar y Alonso Torres, estudiantes en práctica que se unen al trabajo administrativo que realizan las profesionales de esta área.
Los estudiantes de la Casa de Bello estarán durante cuatro meses apoyando las distintas labores que realiza el área administrativa del CEv, enfocadas principalmente en la gestión de información y la creación de modelos de análisis de datos.
Por una parte, Ronald, estudiante de Ingeniería Civil Industrial, está enfocado en las reuniones con actores relevantes en el manejo de la información a nivel institucional, explorando datos accesibles para el Consejo y trabajando en un modelo de datos que permita detectar patrones en la información. Todo esto irá en directa colaboración con los estudios técnicos que realizan los consejeros.
Sobre esto, la coordinadora de Supervisión de Procesos Evaluativos, Tatiana Canales, destacó que “esta oportunidad nos permite dedicarle tiempo y análisis a un área esencial a la función del Consejo, relacionada con la capacidad de gestionar información para hacer análisis independientes en beneficio de la mejora continua de los procesos que supervisa”. Además, aseguró que “esperamos que nos ayude a entender el escenario de la información y cómo aprovecharlo mejor para beneficio de la comunidad académica”.
Por otro lado, el estudiante de Sociología, Alonso Torres, se ha dedicado a la estrategia de vinculación con diferentes organismos y actores de interés, a partir de la sistematización y el análisis de información de reuniones claves.
La encargada de supervisar la práctica de Alonso es María Alicia Naranjo, coordinadora de Análisis y Estudios, quien destacó la importancia de su llegada. “Contar con el apoyo de un futuro profesional sociólogo es clave para el desarrollo de una de las líneas de acción definidas en la agenda del 2024 del Consejo. Además, nos permite conocer la experiencia de un estudiante de la Universidad en su proceso formativo, lo que es muy valioso para nosotros como organismo", comentó.
"Le aconsejo que se nutra del ambiente particular de la Universidad y que aproveche esta oportunidad para conocer la organización desde una perspectiva diferente", agregó.
Los practicantes
En su primer mes de trabajo, tanto Alonso como Ronald califican sus experiencias como satisfactorias. “Siempre se agradece que el primer proceso de ejercer profesionalmente sea tan grato y satisfactorio”, comenta el estudiante de Sociología. “El equipo ha tenido la paciencia de explicarme temas laborales y académicos para mejorar mi integración al equipo de trabajo y han brindado el apoyo necesario para realizar mis tareas de una forma tranquila y manejable, permitiendo que tenga un aprendizaje continuo y constante”, agrega.
Respecto al futuro, Alonso Torres espera “seguir aprendiendo, no solo de la práctica profesional, sino de las profesionales que me rodean con sus consejos, ideas y reflexiones, para tener una formación lo suficientemente rigurosa para desarrollar las tareas que se me asignan”.
Por su parte, Ronald asegura que “la experiencia de práctica ha sido muy satisfactoria por el ambiente en que trabajo, con bastante libertad y flexibilidad en mi actuar”. Además, agrega que “espero aportar con mis conocimientos y proponer mejoras en la gestión académica para facilitar la labor que se está realizando actualmente”.