Durante los primeros días de enero, el Consejo de Evaluación recibió a la Comisión Superior de Calificación Académica (CSCA) de la Universidad de Chile, en un encuentro que permitió avanzar en una agenda colaborativa para fortalecer los procesos de evaluación dentro de la Casa de Bello.
La reunión, que fue encabezada por la presidenta del Consejo de Evaluación, Verónica Figueroa Huencho, y la presidenta de la Comisión Superior de Calificación Académica, la prorrectora Alejandra Mizala, permitió discutir los principales desafíos en torno a la calificación, como la diversidad disciplinar, la inclusión de la categoría postdoctoral y la necesidad de una evaluación más equitativa y alineada con los objetivos estratégicos de la universidad.
Uno de los temas centrales que discutieron las y los consejeros y comisionados fue la necesidad de mejorar la comprensión de los datos de evaluación para que estos sean más accesibles y útiles en la toma de decisiones académicas. En este sentido, se destacó la importancia de gestionar la información de manera más comprensible y alineada con las realidades de cada facultad.
Otro punto relevante fue la diversidad en los sistemas de calificación. Cada unidad académica enfrenta desafíos específicos que reflejan las particularidades de sus disciplinas, lo que hace necesario tener un enfoque más flexible y adaptado a las realidades locales que favorezca un desarrollo integral de las y los académicos.
Además, se discutieron propuestas para reconocer los criterios internacionales que influyen en la evaluación académica, destacando la importancia de avanzar hacia un sistema que considere no solo el desempeño individual, sino también las dinámicas colectivas, así como las contribuciones al ethos académico de la universidad.
La incorporación de la categoría postdoctoral y la consideración de aspectos de género en las pautas de calificación también fueron destacados como avances significativos. Estas medidas buscan reconocer y valorar de manera justa las contribuciones de los académicos y académicas en todas las etapas de su carrera, promoviendo un entorno más equitativo.
La profesora Verónica Figueroa Huencho, presidenta del Consejo de Evaluación, destacó la importancia de este encuentro como un espacio para reflexionar colectivamente sobre el impacto de la evaluación en las trayectorias académicas. “Sin duda la evaluación es un factor clave en el posicionamiento y vigencia de nuestra Universidad, pero también nos permite alinear nuestros esfuerzos con las necesidades de la sociedad a través de lo que buscamos intencionar del trabajo académico. Allí la calificación y sus indicadores deben permitirnos reconocer las particularidades del trabajo académico desde nuestras disciplinas, pero también ayudarnos a avanzar hacia la inter y la transdisciplina, con enfoque de género. Esta reunión de trabajo es una evidencia del espíritu colaborativo que nos mueve a la Comisión Superior de Calificación y al Consejo de Evaluación”
Por su parte, durante la reunión, la prorrectora Mizala resaltó los avances realizados en la alineación de las pautas de calificación con las rúbricas de evaluación. Estas pautas, adaptadas a las particularidades de cada disciplina, buscan garantizar que el proceso sea representativo de las expectativas académicas en las carreras docente y ordinaria.
Finalmente, ambas instancias reafirmaron su compromiso de trabajar juntas en una agenda de largo plazo que permita enfrentar los desafíos futuros de la Universidad de Chile. Este esfuerzo incluye el desarrollo de estudios conjuntos, la reflexión sobre la evolución de la labor académica y la implementación de cambios graduales hacia un sistema de evaluación más integral y conectado con las necesidades del país.